El domingo 30 de septiembre, Tampico amaneció con 600 toneladas de basura en sus calles. La ciudad de las jaibas era un auténtico basurero.
Eso no fue todo: 2 mil lámparas del alumbrado público del municipio se encontraban fundidas. Este dato se corrobora con la misma cantidad de folios en el área de Servicios Públicos que registraban las solicitudes de múltiples colonias que exigían con urgencia la colocación de nuevas luminarias.
El alto porcentaje de demandas para atender la problemática de la falta de alumbrado público que dejó la pasada administración municipal que presidió Magdalena Peraza Guerra se refleja en otra estadística: de 112 peticiones planteadas durante el Martes Ciudadano, realizado en la Plaza de Armas, 87 solicitaban una lámpara en el poste de la esquina.
Las colonias más afectadas por la carencia de alumbrado, según el registro de los primeros 10 días de la nueva gestión municipal, fueron Morelos, Obrera, Revolución Verde y Unidad Modelo, entre otras.
¿Qué fue lo que sucedió para que las calles de Tampico se inundaran por cientos de toneladas de basura y que docenas de sectores se encontraran a oscuras porque 2 mil lámparas estuvieran fundidas? ¿Qué pasó en el departamento de Servicios Públicos para que la ciudad descendiera a niveles vergonzosos y lamentables?
Existe un error de origen en esta problemática que dejó la anterior administración municipal: Magdalena Peraza Guerra designó a su cuate Juan Berrios, un personaje sin preparación académica pero muy ambicioso, como director de Servicios Públicos. Esa fue una grave equivocación, una negligencia que iba a provocar consecuencias.
Servicios Públicos se convirtió en un ‘tiradero’ en la gestión pasada, reflejo de la personalidad de Juan Berrios, un funcionario inculto que no funcionó.
Un dato que, en su momento, será investigado a fondo: el Ayuntamiento de Tampico, en el periodo 2016-2018, suscribió convenios con 538 negocios (desde misceláneas hasta las más grandes tiendas de autoservicio de la localidad) para recolectarles la basura.
Eso convenios iban, en promedio, desde los 200 pesos hasta los 14 mil pesos mensuales. Una de las cosas que más llaman la atención de esos convenios es que no existen cifras exactas sobre cuánto dinero ingresó a las arcas municipales.
Al respecto, hay un ‘detalle’: un grupo de inspectores salían a cobrar a los negocios pequeños, los cuales pagaban en efectivo. Una vez que recibían el recurso, los inspectores iban -se supone- al Palacio Municipal a dejar el dinero, pero… hay sospechas de que los traslados o las operaciones no siempre se concretaban.
Aquí es donde, en este apartado (hay otros más), despunta el estrecho vínculo entre el ex director de Servicios Públicos, Juan Berrios, y el ex tesorero, Edgar Animas, por cierto, compadres, socios y ‘amiguis’ del alma.
El hecho de que dejaran una gran cantidad de vehículos desmantelados es otro de los indicios. De entrada, el taller era un auténtico ‘barril sin fondo’ (muchos recursos canalizados con nula eficiencia), situación que genera una ola de sospechas.
Por esta razón, el regidor del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Alberto Sánchez Neri, propuso en la sesión de Cabildo del martes pasado la creación de una Comisión de Investigación para ir a fondo en las irregularidades detectadas en las áreas de Servicios Públicos y Tesorería de la administración que encabezó Magda Peraza.
El regidor perredista se ha topado en sus recorridos con una extensa variedad de anomalías, quejas y versiones en distintas áreas del municipio ante problemas que heredó la anterior gestión, sobre todo en Servicios Públicos y, por consecuencia, en la Tesorería.
La integración de la Comisión Investigadora se definirá en una reunión de trabajo que posiblemente se realice la próxima semana, a fin de que la Comisión, ya con los nombres de sus miembros, sea aprobada en la tercera sesión ordinaria de Cabildo de octubre.
Se prevé que esta Comisión Investigadora sea integrada por el Secretario del Ayuntamiento, el Contralor Municipal, uno de los síndicos y regidores de los distintos grupos partidistas, entre ellos, Alberto Sánchez Neri.
En caso de que la Comisión de Investigación llegue a encontrar pruebas sólidas de un desvío de recursos o de un desfalco al erario público se presentará una denuncia penal ante las autoridades correspondientes.
Al concluir la sesión de Cabildo del martes, en entrevista con los medios, el presidente municipal, Jesús Nader Nasrallah, aseguró: ‘Vamos a llegar hasta las últimas consecuencias en caso de que encontremos alguna anomalía’.
Está más que claro: la investigación va en serio. No es ningún juego. De encontrar evidencias, van por los dos compadres.
Y PARA CERRAR…
Ana Astrid Ruiz Mancilla, ex regidora del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) en el Cabildo anterior, ya despacha como subdirectora de Protección Ambiental en el actual Ayuntamiento porteño.
Todo indica que José Luis Ortiz, el otro ex regidor ‘verde’, pronto se incorporará a la administración 2018-2021.