MÉXICO.- Por adoptar, alimentar y acariciar a una gatita callejera sin tomar precauciones, una joven de 24 años de edad enfermó de gravedad contrayendo Guillain-Barre.
Gemma Birch encontro a la pequeña gatita en la calle y decidió llevarla a su apartamento donde la alimentó y acarició pues «Catarina» como nombró a la gata, no dejaba de seguirla a todos lados.
La chica se encontraba de vacaciones en Albufeira, Portugal cuando comenzó a presentar vómito descontrolado y desmayos durante el vuelo de regreso a su hogar.
Luego de arribar a su destino fue trasladada al hospital donde los médicos le diagnosticaron una infección causada por comer pollo crudo, pero ella dijo llevar una estricta dieta vegana.
Luego de cuestionarla para encontrar otras causas, los médicos preguntaron si había tenido contacto con animales y ella recordó a Catarina. Los médicos dijeron que probablemente contrajo la infección a través de su gato.
Al superar los episodios de vómito, fue dada de alta pero regresó a los dias quejándose de un etumencimiento de piernas fue cuando recibó el diagnóstico: síndrome de Guillain-Barre, que causa un trastorno neurológico en el cual el sistema inmunológico ataca al sistema nervioso.
Debido a la enfermedad quedó postrada en una silla de ruedas y tras varios meses de terapia aprendió a caminar de nuevo, no sin antes haber sufrido pérdida de control de vejiga, intestinos, brazos y manos.
Tras 14 largos meses la joven recuperó su salud y pudo caminar de nuevo pero con secuelas como entumencimiento en extremidades cada que tiene una infección.
Los especialistas recomienda que antes de llevar a un gato o cualquier animal callejero a casa se deben tomar precauciones como un baño adecuado, desparasitante y poner las vacunas adecuadas además de practicarle exámenes de salud con un veterinario.
Con información de debate
