HERMOSILLO.-Max, el perrito Husky Siberiano que vendía cupcakes en la Plaza Zaragoza para pagarse sus medicinas, perdió la vida tras una difícil lucha contra el cáncer.
Hace unos días se viralizó la historia de Max, un perrito que vendía cupcakes junto a su dueña para poder financiar sus quimioterapias.
Este can, de tan solo dos años de edad, fue abandonado por su antiguo dueño quien lo empleaba para preñar perritas en un criadero clandestino, pero cuando Max enfermó, este sujeto lo echó a la calle.
Yoselín Macías, una joven originaria de Hermosillo, lo adoptó y comenzó a trabajar en la venta de panes para brindarle calidad de vida a su nuevo amigo.
Hoy, a menos de dos semanas de que Max conquistara el corazón de miles de usuarios en redes sociales, esta joven ha comunicado que Max no resistió más y finalmente falleció.
Yoselín agradeció a todos aquellos que ayudaron a Max de diversas formas y “de todas partes del mundo”, pues entre las personas que le escribieron hubo muchas de Latinoamérica y hasta de Europa.
“Mi querido Max no se me concedió verte jugar y correr como tanto lo deseaba pero sé que cuando me toque partir serás lo primero que vea y prometo jugar mucho contigo”, escribió Macías en su cuenta de Facebook.
CON INFORMACIÓN DE NOTICIEROS TELEVISA