CIUDAD DE MÉXICO.-En el Hospital General “Dr. Manuel Gea González” de la Secretaría de Salud, uno de los receptores sin disponibilidad en la zona sur de la Ciudad de México, el área de urgencias está saturada, el sexto piso de Terapia Intensiva también está lleno con todos los ventiladores ocupados y el quinto piso, aunque era solo para pacientes estables, en cuestión de horas requieren conectarse a un ventilador. La poca disponibilidad de camas es porque se recuperan, son trasladados a otros centros o porque mueren.
“Estar ahí dentro es indescriptible. Es mucho estrés estar escuchando a la gente que se está ahogando, que quiere ver a su familia o ver que no están respondiendo a las medidas a un paso antes de la entubación. Hay pacientes que lamentablemente una vez entubados la mortalidad es alta [la letalidad va en el 56 por ciento, Secretaría de Salud]; entonces fallecen los pacientes y las camas se vuelven a llenar de más pacientes”, contó vía telefónica una médica del Gea González, quien cuenta con dos certificaciones en manejo de ventiladores debido a cursos gratuitos dados por universidades y fundaciones, aunque, aclaró, el manejo con pacientes con la COVID-19 es muy diferente a cualquier otro problema pulmonar.
“En el primer mes y medio me estresé mucho porque todos los días la entrega de guardia era ‘este paciente ya falleció’, ‘este paciente ya se entubó’, ‘este paciente no está respondiendo’. Esta última semana no sé si es el cansancio mental o la costumbre… pienso ‘hubo tantas defunciones’ y ya”.
La doctora también cuenta con ansiolíticos y antidepresivos ante la imposibilidad de dormir por el estrés y con tres maletas para transportar la ropa con la que entra, otra para cambiarse después de salir del área de coronavirus y otra para cargar su equipo de protección personal. A dos meses de atender pacientes contagiados en turnos de seis horas, presenta úlceras en la cara por los goggles. No puede respirar cuando usa todas las herramientas y suele dolerle la cabeza. Cuenta los minutos para poder quitarse todo.
En las 16 alcaldías de la Ciudad y 59 municipios conurbados del Estado de México, donde habitan más de 22 millones de habitantes, se concentra el mayor contagio de la COVID-19. La zona pasa por el pico desde el 8 de mayo. Más allá de las cifras oficiales de casos positivos y decesos, puestas en duda por la prensa internacional, la alta demanda en hospitales y funerarias privadas desde abril y sobre todo en mayo refleja una crisis en escalada en la región centro del país. Aunque autoridades y grupos funerarios rechazan que aún se llegue a la saturación total.
Ambas entidades acumulan más de 17 mil 700 casos positivos de los más de 40 mil registrados a nivel nacional (13 de mayo) y se reportan cerca de 5 mil 500 pacientes hospitalizados, de los cuales, el 20 por ciento está intubado, exponen cifras oficiales. La Ciudad de México, con 30 por ciento de disponibilidad de camas y 43 por ciento con camas con ventilador, es líder en número de casos acumulados, casos activos y defunciones a nivel nacional, revelan datos de la Secretaría de Salud hasta el 13 de mayo.
El Gobierno de la capital del país reporta más de 10 mil detectados con coronavirus, sobre todo en Iztapalapa (2,093), Gustavo A. Madero (1,351), Tlalpan (864), Álvaro Obregón (684) y Coyoacán (650); más de 3 mil hospitalizados con más de 900 entubados, así como más de mil defunciones (principalmente en la GAM, con 1 millón de habitantes). Alrededor del 30 por ciento de los habitantes del Valle de México y otras ciudades se hospitalizan en la Ciudad por la concentración de la infraestructura de salud, detalló la Secretaria de Salud local, Oliva López Arellano. La disponibilidad de hospitales cambia en días.
Ante las notas del diario New York Times y El País, la Jefa de Gobierno Claudia Sheinbaum aclaró que no ocultan cifras de decesos ni hay falta de coordinación con el Gobierno federal, ya que hay un comité especializado que determina si las muertes reportadas a diario son por la COVID-19 o por otra causa.
A diferencia de hospitales del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) a nivel nacional, en el Hospital General “Dr. Manuel Gea González” y en el Instituto Nacional de Nutrición “Salvador Zubirán”, también ya en su máxima capacidad con más de 60 pacientes entubados, los pacientes no son colocados en sillas ni en los pisos de los pasillos, dijo el personal médico consultado.
“Al momento de entubarlos es imposible tenerlos en sillas”, aseguró la doctora del Gea González. “Siguen llegando bastantes en un estado más grave de salud. Pero hay un centro regulador de traslados donde deciden si hay condiciones de ser traslados a otros donde haya más cupo”, dijo la doctora de Nutrición que también atiende pacientes entubados. El Instituto de la SSA planea abrir otro espacio para unos 15 ventiladores más.
Pero la alta demanda se refleja en el cansancio y estrés del personal médico. “Mi jornada (un día sí, dos días no) empieza un día siguiente porque aunque sea mi descanso, no lo disfruto; siento angustia, tristeza y estrés de pensar que al día siguiente debo ir”, contó la médica del Gea González. “Atendemos alrededor de 40 pacientes críticos dos o tres médicos, lo que se me hace inhumano para el paciente y para nosotros”.
Por su parte, el Gobierno del Estado de México reporta más de 6 mil 500 casos concentrados en los municipios aledaños a la Ciudad de México, esto es, Nezahualcóyotl, Ecatepec, Naucalpan, Tlalnepantla y Chimalhuacán; más de mil 500 hospitalizados con 250 entubados, así como 378 muertos (más en Ecatepec, con 1 millón y medio de habitantes). El 43 por ciento de sus camas tiene disponibilidad y el 47 por ciento de camas con ventilador sigue libres, muestran las cifras de la SSA hasta el 13 de mayo.
CON INFORMACIÓN DE SINEMBARGO.MX