MÉXICO.-El confinamiento sanitario por el coronavirus amenaza las cajas registradoras de las tiendas de autoservicio, quienes tienen en esta temporada alrededor de 30 por ciento de sus ventas anuales, apenas por debajo de la temporada decembrina. Este año la temporada de descuentos, que va de junio a agosto, llegó en un entorno económico complicado y frente a una nueva normalidad que le exige a los consumidores quedarse en casa y visitar las tiendas solo para hacer compras esenciales. “Hay una situación de entorno económico que evidentemente es diferente a cualquier otra temporalidad en años pasados, porque ya veíamos algunos indicadores macroeconómicos que venían cayendo, como la pérdida de empleos, la Inversión Extranjera Directa (IED), el PIB y la confianza del consumidor, que es algo que hay que tomar mucho en cuenta”, dijo en entrevista con MILENIO Ricardo Torres, director de Retail Services para la investigadora de mercados Nielsen México. Además, de acuerdo con el especialista, una de las consecuencias de haber estado “encerrados” es que muchos consumidores ya probaron otros canales de compra. Hubo “switcheo entre canales, algunos optaron por los de cercanía y otros por el online”. De acuerdo con la consultora, la penetración de compras por internet (que ahora representa entre 6 y 7 por ciento de las ventas de autoservicios) subió hasta 30 por ciento en el país durante la pandemia, lo que significa que categorías no nativas del comercio digital se están sumando a ese canal; pese a ello y a las estimaciones positivas de compradores que permanecerán haciendo uso del e-commerce, la consultora prevé que este año la temporada de descuentos no mostrará una variación positiva importante. Torres dijo que el consumidor que está confinado ahora tiene otra opción, como esperar a que el producto que llegue. “Esperamos que algunos de esos consumidores retornen a su principal canal y aprovechen los descuentos. Un consumidor lo que va a buscar son descuentos y valor por su dinero”, señaló el especialista.