CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- Momentos de pánico vivieron vecinos de las calles Nicolás Bravo y Fermín Legorreta, luego de registrarse la explosión de una vivienda que ubica justo enfrente a una gasolinera.
Fue las 15:40 horas cuando los residentes de esta zona escucharon un fuerte estruendo que dejó vibrando sus ventanas.
Al salir a la calle para ver lo que había sucedido, se percataron que uno de los domicilios estaba envuelto llamas, por lo que de inmediato se comunicaron al 911.
Debido a que la propiedad esta a escasos metros de una estación de servicio, se activó una alerta general para todas las corporaciones ante un posible desastre.
Los primeros en llegar hasta la zona fueron los elementos de Protección Civil y Bomberos del Municipio, quienes se toparon con una cochera cubierta por el fuego y a media cuadra de distancia, una pipa de gas.
Una ambulancia perteneciente al Estado, fue la segunda en llegar para atender a un hombre de alrededor de 35 años y a su pequeño hijo de aproximadamente 10.
Milagrosamente, el pequeño resultó ileso al incidente pero debido a que estaba solo tuvo que acompañar a su padre al nosocomio ya que este si sufrió quemaduras de segundo grado.
Mientras la unidad emprendía su viaje al nosocomio, los bomberos se quedaron para sofocar las llamas que consumieron varios anaqueles que contenían objetos diversos, como aparatos, muebles y herramientas.
Una vez controlada la situación, uno de los bomberos encontró entre los restos incandescentes, una jaula que tenía en su interior a un roedor conocido como “cuyo” el cual, para asombro de todos estaba con vida y solo un poco asustado.
Al tiempo que todas estas labores se realizaban, elementos de tránsito se encargaron de cerrar las calles aledañas y los policías estatales mantenían al margen a los curiosos.
Un empleado de la gasolinera que esta cruzando la calle, fue uno de los testigos principales de esta hecho que pudo convertirse en una catástrofe.
“El Chino” comentó que se encontraba esperando a que un vehículo llegara para surtir combustible y en ese momento, una pipa de gas se detuvo en la acera de enfrente.
Segundos después el dueño de la casa abrió el portón para que los trabajadores ingresaran a surtir un tanque de alrededor de 120 kilos.
Agregó el despachador que cuando ya lo estaban llenando, se escuchó una fuerte explosión y al voltear a ver, se percató como toda el area se cubría de fuego, al igual que las personas que estaban ahí.
Tratando que no se empeoraran las cosas, les grito a los trabajadores de la gasera que movieran la pipa mas adelante, pues incluso la manquera de la válvula se había achicharrado.
Afortunadamente pocos minutos transcurrieron para que los elementos llegaran y comenzaran a trabajar en este hecho, que muy seguramente se derivó de una acumulación de gas.
Ya cuando las labores finalizaban, los empleados de la gasera pidieron ser atendidos, pues en el momento no sintieron las quemaduras ante el fuerte susto que vivieron, tal vez el peor de sus vidas.
Uno de ellos fue llevado al Seguro Social por una ambulancia de Cruz Roja.
POR ALEJANDRO DÁVILA
EXPRESO – LA RAZÓN
