Pese que, a decir de los panistas y algunos priistas, como el regidor electo de Tampico, Roberto González Barba, la alianza electoral del PAN con el PRI y el PRD de cara a la elección de gobernador de 2022 es un hecho, hay señales que indican que la eventual coalición estaría todavía en el aire y que, incluso, existen probabilidades de que esta no llegara a concretarse.
El propio dirigente estatal del tricolor, Edgar Melhem Salinas, menciona entre ellas que Acción Nacional quiere tumbarle el Revolucionario Institucional los triunfos obtenidos en las alcaldías de Abasolo, Jiménez y Guemez y las fuertes presiones que ejerce a través de la Auditoría Superior del Estado para obligar a exalcaldes a operar a favor del partido albiazul en la contienda del año que viene.
También destaca el rechazo de amplios segmentos del partido para hacer causa común con los albiazules después de que estos menospreciaran la oferta priista para contender juntos en los comicios del 2021, que entonces si resultaba conveniente para los intereses políticos del priismo estatal. Como al CDE del partido de Gómez Morín no le convenía, desairaron la alianza, sin embargo, ahora que es a ellos a los que les interesa la están buscando, pero a nosotros no, dice el jerarca tamaulipeco.
Otros factores que aconsejan no aliarse es que el PAN tiene una desaprobación ciudadana del 40 por ciento, razón por la que a los priistas no solamente no les resulta provechoso sino también riesgoso jugársela con los panistas debido a las elevadas posibilidades de que sufra una derrota y que en el CEN, que es el que decidirá si se concreta o no el acuerdo aliancista, no ha incluido el tema en la agenda de trabajo.
Todos estos elementos, que ya fueron expuestos al alto mando nacional, según el nativo de Río Bravo, demuestran que no existen condiciones adecuadas para la celebración del pacto electoral.
El priista que, a propósito, debe de estar de plácemes por esa situación es el aspirante a la candidatura de gobernador, Ramiro Ramos Salinas, que recorre la entidad en busca del respaldo de las bases del ex invencible y que en reiteradas ocasiones ha expresado que le parece más apropiado que el ex partido oficial contienda solo en la competencia del año que viene.
Como el ex dirigente estatal, el que también recorre el Estado en busca de apoyo para conseguir la postulación de candidato a gobernador pero con la camiseta de la 4T, es Felipe Garza Narváez, que ha empezado a dar a conocer sus propuestas de trabajo. En materia de Salud, por ejemplo, el ex Presidente del Congreso adelanta que, si el voto lo lleva a la gubernatura, realizaría una remodelación y equipamiento de las instalaciones de clínicas y hospitales, contrataría más especialistas, garantizaría el abasto de medicinas y firmaría un convenio con el INSABI.
Mientras tanto, en ciudad Madero el regidor electo y también dirigente del SUTSHA, Azael Portillo Alejo ha encabezado sesiones de trabajo con los 600 trabajadores de la agrupación para dar a conocer los asuntos que se plantearán al gobierno municipal con el objeto de mejorar las condiciones laborales y contractuales, así como para escuchar las sugerencias, demandas e inquietudes de la base sindical destinadas a seguir trabajando en equipo con el alcalde Adrián Oseguera en todo aquello que beneficie a la población y al gremio.
En Altamira, por otra parte, los excandidatos a alcalde han avalado las propuestas que el alcalde electo, Armando Martínez Manríquez, pretende poner en práctica a partir del primer día de octubre, cuando asumirá el cargo, como la reducción de salarios y la nómina municipal, aumento a la inversión en obra pública y programas sociales, igual que el combate a la corrupción y la impunidad.
En temas de otra índole, al que le salió contraproducente el tuitazo del día fue al ex presidente Felipe Calderón.
Más tardó el michoacano en señalar que para cambiar estatuas, como la de Cristóbal Colón que existe en el Paseo de la Reforma de la ciudad de México, para erigir en su lugar la de una representante indígena, debe preguntarse primero a los ciudadanos, que Manuel Clouthier Carrillo, hijo de Maquío, en responderle que también debe de consultarse para ponerlos, como la Estela de Luz y de corrupción que mando instalar durante su mandato en la capital del país.
Antes de concluir, el dirigente nacional del PRI, Alejandro Cárdenas Moreno, se pronunció abiertamente en contra de la revocación de mandato del presidente, debido a que, considera, esta generará un ambiente de polarización que daña al país y obstaculiza la solución de los problemas nacionales prioritarios.
POR JOSÉ LUIS HERNÁNDEZ CHÁVEZ
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