En menudo lío se han metido los muchachos del Partido Verde en Tamaulipas que comanda el victorense- potosino César García Coronado y su asesor, “El Bobby” Hernández, pues no solo han provocado el enojo de los dueños de la franquicia partidista en la ciudad de México, por la forma como salieron de San Luis Potosí, culpados de todos los males, sino que ahora se han metido, sin permiso de sus dirigentes nacionales, a promocionar aspirantes a la gubernatura por Morena.
Oficiosamente, César y el “Bobby”, han puesto todo su equipo de operadores al servicio del nuevo coordinador de los Programas Federales, a quien le han prometido ponerlo en los cuernos de la luna, y mero arriba en las encuestas..
Pero su juego no termina ahí: estos muchachos, ya saben que poner los huevos en una sola canasta, es un error, por eso también le mandaron a la ex presidenta municipal de Reynosa, Maki Ortiz, a sus operadores, Manuel Muñoz Cano y Paco Cruz que ya están al frente de batalla.
Y aunque se corrió el chisme que César y Manuel, tuvieron ya sus discrepancias, en la ciudad de México, reprueban al cien por ciento lo que andan haciendo los “verdes tamaulipecos”.
Dicen en la capital azteca, que los “Verdes” andan acá por la libre y que le han vendido a Maki y al superdelegado la idea de hacerlos ganar como lo hicieron con el “Pollo” Gallardo en la entidad tunera.
Lo que no saben los aspirantes morenos que su presupuesto está en peligro. Que pregunten en San Luis, por qué. El baño que se dieron en SLP fue de escándalo.
Los “Verdes”, juegan al más puro estilo del viejo PRI, donde todos jugaban y apostaban por todos, y el que ganaba, al final se los jalaba al equipo. El asunto es que aquí César y compañía traen una fama de los mil demonios.
Hasta donde se sabe, el Partido Verde se va ir en alianza con Morena en la elección del 2022, así lo tienen definido los Dioses en lo más alto del poder, pero les preocupa que sus operadores de Tamaulipas jueguen chueco y pongan a disposición la estructura, que ya están armando, al mejor postor.
MUCHO REVUELO y comentarios de todo tipo desató este fin de semana la reunión de la “unidad” que sostuvieron en algún lugar de Nuevo León los aspirantes de Morena a la gubernatura.
La idea fue enviar un mensaje a Maki Ortiz que anda como yegua desbocada por el Estado en busca de la nominación, pero también se dice que fue para taparle la boca a los que juran que la palabra unidad en el partido de la 4T es pura vacilada.
Ahí se juraron lealtad, pero horas después, uno de ellos se pintó para la frontera y les sacó la lengua a todos.
A PROPOSITO DE LA VISITA de Maki Ortiz a la capital de Tamaulipas el pasado viernes, parece que no agradó a muchos morenistas, sobre todo algunos aspirantes, que el alcalde Lalo Gattás haya recibido con bombo y platillo a la reynosense en la casona del Pool 17.
Más cuando las cabezas de la 4T en Tamaulipas nada quieren saber de ella. Dicen que Lalo pecó de ingenuo, aunque otros dicen, que de otra cos.
Por cierto muchos se quedaron con las ganas de que la ex edil, se abriera y dijera: “Voy por Morena”, pero no, siguió sin definirse y ahora lo falta que vaya caer en en garras de Los Verdes, que ya afilan las uñas, y más cuando dicen que la señora trae harta lana.
POR LOS RUMBOS del PAN, todo está cocinado para que el flamante secretario general de gobierno, Cesar Verastegui, el popular Truco, deje el cargo y se vaya hacer grilla grande para conseguir la candidatura azul.
Este domingo circuló un redes sociales una convocatoria para el próximo fin de semana donde muchos le estarán dando su apoyo.
“Todos por Tamaulipas”, dicen sería su grito de batalla.
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