VICTORIA.- A pesar de las constantes quejas por los recortes presupuestales o por la fiscalización de la autoridad electoral, en los últimos seis años los principales partidos políticos se han embolsado 996 millones de pesos de financiamiento público.
Buena parte de esos recursos se ha manejado en la opacidad, pues casi ninguno cumple con la publicación de sus informes financieros en la Plataforma Nacional de Transparencia.
Desde los partidos más poderosos y exitosos en las elecciones, hasta los que a duras penas pueden competir, han tenido acceso a jugosas bolsas económicas para sus actividades ordinarias, y para la realización de sus campañas.
Los comités estatales de los partidos son los encargados de recibir estos recursos económicos y de administrarlos.
La distribución del pastel presupuestario se define en base a los resultados electorales obtenidos en la elección más reciente, pero hay un 30% del recurso total que debe repartirse por partes iguales a los partidos que hayan obtenido por lo menos el 3 por ciento de los votos.
Con la llegada de la alternancia a Tamaulipas, ha cambiado constantemente el mapa del poder durante los últimos seis años, por lo que en ese periodo prácticamente todos los partidos políticos han tenido en algún momento acceso a una tajada del presupuesto público.
Por sus resultados en las urnas, PAN, PRI y Morena han sido los partidos más beneficiados con el financiamiento público.
Del 2016 a la fecha, Acción Nacional ha recibido 403 millones de pesos; el PRI 271.9 millones de pesos y el Movimiento de Regeneración Nacional 150.9 millones de pesos.
Pero también los partidos que han ido dando tumbos políticos en los últimos años, han recibido presupuestos millonarios.
La dirigencia estatal de Movimiento Ciudadano por ejemplo, recibió en seis años 74.36 millones de pesos.
Tan sólo en el 2021, entre el financiamiento para sus actividades ordinarias y el gasto para la promoción del voto, llegaron a sus arcas 19.35 millones de pesos.
Hay otros partidos que supieron capitalizar su cercanía con el poder en los últimos años.
Por ejemplo el Partido Verde Ecologista de México que obtuvo de sus alianzas con el PRI, 9 millones de pesos en el 2016, 8.67 millones de pesos en el 2017 y 12.2 millones de pesos en el 2018.
Ese fue el último año que accedieron al financiamiento público, pero si se cuenta el recurso que recibieron para encarar el más reciente proceso electoral, en total acumulan 31.6 millones de pesos obtenidos en seis años.
Un caso muy similar es el del extinto Partido Nueva Alianza, que en el 2016 manejó 10.8 millones de pesos, en el 2017 fueron 9.56 millones de pesos y en el 2018, 13.48 millones de pesos para un total de 33.87 millones de pesos.
El Partido del Trabajo también tuvo su momento más importante en el 2016, cuando recibió 9.18 millones de pesos.
Hasta el Partido de la Revolución Democrática ha tenido acceso a jugosas bolsas económicas: 14.45 millones de pesos en los últimos seis años.
Gasto opaco y a discreción
El gasto público en los partidos ha ido en constante aumento durante los últimos años.
En este proceso electoral, el 2021, se destinaron 193.32 millones de pesos a los partidos políticos para sostener sus actividades ordinarias, específicas, y para promover el voto. Fue el más caro hasta el momento.
El año pasado, sin proceso electoral de por medio, se entregaron 149.11 millones de pesos; en el 2019 con la elección intermedia para renovar el Poder Legislativo local, fueron 187.76 millones de pesos; en el 2018 fueron 170.87 millones; en el 2017 fueron 119.67 millones de pesos y en el 2016, 175.45 millones de pesos.
Estos recursos llegan a los comités estatales a través de ministraciones mensuales, sin embargo poco se sabe sobre su destino final.
En una revisión realizada esta misma semana, ningún partido político tiene disponible información financiera o sobre sus ingresos públicos en el apartado destinado por la Plataforma Nacional de Transparencia.
El Instituto de Transparencia y Acceso a la Información de Tamaulipas, ha emitido algunas sanciones menores en los tras denuncias directas de ciudadanos por la opacidad de algunos partidos políticos.
El presidente de Morena en el estado, Enrique Torres Mendoza, recibió tres multas que en total suman 78,192 pesos por incumplir con tres resoluciones del Instituto, luego de la queja interpuesta por ciudadanos solicitantes de información pública.
Y el titular de la Unidad de Transparencia del PRI, recibió una amonestación pública por haber incumplido en una primera ocasión, a una petición ciudadana.
El Artículo 70 Ley General de Transparencia y Acceso a la Información Pública señala que deben hacer pública la remuneración bruta y neta de todos los empleados.
Además de todas las percepciones, incluyendo sueldos, prestaciones, gratificaciones, primas, comisiones, dietas, bonos, estímulos, ingresos y sistemas de compensación, señalando la periodicidad de dicha remuneración.
Por Staff