11 julio, 2025

11 julio, 2025

Dos frentes en el control de la inflación

REFLEXIONES EN ECONOMÍA / JORGE ALBERTO PÉREZ CRUZ

Este año ha sido muy intenso en materia económica, caracterizado principalmente por el desenfrenado crecimiento de los precios en el país, lo que ha llevado a un conjunto de medidas regulatorias que pretenden detener esta dinámica de precios, que bien vale la pena señalar que el propósito es el de disminuir el valor de la inflación, pero los efectos que ha generado han llegado para quedarse, es decir, es difícil pretender que los precios generalizados de los bienes y servicios disminuyan y alcancen el nivel del año previo o el de hace dos años, esto solo podría aplicar en los precios de los energéticos y productos altamente volátiles como los productos agropecuarios.

En este sentido, el plan antiinflacionario busca frenar el crecimiento de los precios, ya que de no hacerlo tendrá un efecto severo sobre el bienestar de la población, principalmente a través de una profundización en la reducción de la capacidad de compra de la población, lo que por cierto ya ha provocado que las familias, para mantener su nivel de consumo, han desarrollado actividades adicionales informales o simplemente han aceptado trabajos adicionales sin seguridad social.

Pero vale la pena señalar que este plan llega tarde, ya que desde marzo-abril de 2021 se observaba que el precio del petróleo comenzaba a crecer de manera consistente, siendo el factor más relevante en presionar sistemáticamente el crecimiento de los precios del resto de los bienes y servicios. Fue a través del aumento constante de la gasolina y diésel que las empresas comenzaron a realizar sus ajustes de precios, iniciándose un efecto en cascada para la totalidad de los sectores económicos.

Sin embargo, también hay presiones en los precios por la recuperación de las cadenas productivas internacionales, que han provocado un desequilibrio de la oferta y la demanda, estas se han transmitido a la economía mexicana a través del sector manufacturero, pero también hay que reconocer que parte de la producción de este sector se exporta, así que su impacto ha sido menor.

De esta forma, resulta que la falta de un control temprano en los precios de los energéticos es lo que ha generado que la inflación se descontrole en México. Esto tiene sentido, sobretodo, al observar que los incrementos de la tasa de interés por parte del Banco Central, no desaceleraron los precios; por el contrario, los precios continuaron creciendo. A pesar de esto, la política monetaria se encamina a seguir aumentando la tasa de interés, es por ello que observamos el día de ayer que esta se elevó a 7 por ciento anual.

En este momento hay dos frentes importantes tratando de controlar los precios; por un lado, el plan antiinflación del gobierno federal y, por otro, el aumento de las tasas de interés; el primero en fracasar podría crear mercados ilegales, aunque también podría tener efectos positivos en el control de la inflación. Pero lo que más preocupa es el alza de la tasa de interés, porque esto provocará ua importante caída en la producción del país y empleo. En este sentido, se podrían controlar los precios con un PIB real más bajo y un aumento del desempleo. Usted ¿qué piensa?

Por Jorge Alberto Pérez Cruz

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