No se tiene idea cuál será el desenlace del enjuiciamiento a que será sometido el dirigente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, al que se acusa de presunto financiamiento electoral no reportado durante su campaña de gobernador de Campeche, pero es la primera vez que se procede jurídicamente contra un dirigente partidista de ese rango.
Cuando se suponía que la difusión de una serie de audios en los que se escucha a Alito exigir dinero a proveedores para gastos proselitistas, aportaciones de Cinépolis de 25 millones de pesos para las campañas electorales y el pago de cinco millones de dólares a publicistas extranjeros para desacreditar a López Obrador, solo quedaría en un juicio mediático, fue presentada una denuncia formal ante el INE.
El propio consejero Presidente del instituto electoral, Lorenzo Córdova, dio a conocer la noticia durante una gira por Quintana Roo en la que el árbitro de la contienda adelantó que, previa investigación del caso, si se detecta conducta indebida del acusado, se resolverá lo que haya lugar de manera imparcial.
Cabe señalar que, independientemente de lo que la autoridad electoral decida sobre la imputación, la sola publicación de las grabaciones, que el propio campechano reconoce como suyas, ha exhibido al jerarca priista como uno de los presidentes nacionales del tricolor de más baja ralea de los años recientes.
No hay que pasar por alto, además, que, encima, el hecho de que el incidente haya salido a la luz pública en pleno proceso electoral de seis gubernaturas va a repercutir negativamente contra los aliados del PRI el día de las votaciones del 5 de junio, dentro de dos semanas.
SEGUNDO DEBATE
Mientras son peras o son manzanas, el escenario está listo para el segundo debate electoral organizado por el IETAM para los candidatos a gobernador de Tamaulipas. Lamentablemente, como ya es del dominio público, la ausencia del candidato de Morena, Américo Villarreal, le ha restado atractivo e interés al magno evento político.
Ojalá que los participantes, César Verástegui y Arturo Diez, aprovechen la ocasión para informar más a detalle los proyectos que tienen en mente llevar a cabo, si el voto de los tamaulipecos los favorece el día de los comicios, en vez de utilizar la transmisión para intercambiar insultos, como sucedió en el del 25 de abril.
El alcalde con licencia de Tampico, Chucho Nader, por otra parte, se ha metido de lleno a la campaña electoral. Tras recibir el visto bueno del cabildo para ausentarse de sus labores edilicias, el munícipe porteño sostiene a diario reuniones con electores de los sectores de mayor número de votantes, como las de la Unidad Modelo, Colosio, Jardines de Champayán y Jesús Elías Piña.
En algunos de ellos promueve al Truko, en otros hace amarres y aprieta tuercas.
A diferencia de Nader, el alcalde de Madero, Adrián Oseguera, dedica el tiempo completo a las tareas municipales. El titular del ayuntamiento pidió en días pasados a la Guardia Nacional envíe mayor número de efectivos a la ciudad para reforzar las actividades de vigilancia y seguridad de la población que ahora realiza en coordinación con elementos de la policía estatal.
Al mismo tiempo, ha dispuesto una mayor vigilancia de los drenes pluviales para evitar que los vecinos tiren la basura en los desagües y prevenir las inundaciones y encharcamientos en la próxima temporada de huracanes y tormentas tropicales.
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