Tamaulipas no es y por mucho, el estado más violento del noreste del país, ni siquiera del Golfo de México, por el contrario y pese a la fama que tardará años en quitársele, Nuevo León, San Luis Potosí y Veracruz son azotados por una ola de asesinatos que en este año rebasan los que en el mismo periodo registraban en el 2021.
Así es mis queridos boes, el tema es importante, no solo por el contexto de la terrible crisis de inseguridad que vive todo el país, sino porque estamos por iniciar el proceso de transición gubernamental y es, digamos normal, que se den desajustes en todos los ámbitos de la vida pública y la seguridad no es la excepción.
Es de vital importancia, para efectos de exigencia a las autoridades, que los ciudadanos sepamos donde estamos parados, de donde se parte, con el fin de empujar para que lo logrado por lo menos se mantenga.
Pero les decía de la severa crisis en seguridad y apenas este domingo, el país registró 103 homicidios dolosos, el día más violento del sexenio, o cuando menos uno de los más violentos.
Este año en México ya van 15 mil 278 homicidios dolosos, sin contar los de ayer, por 14 mil 219 que en el mismo periodo llevábamos en el 2021, y partiendo de ahí, nos daremos cuenta de que Tamaulipas no ha aportado a la subida de los índices de violencia en este 2022, sino por el contrario.
Y es que por ejemplo, San Luis Potosí donde gobierna RICARDO “El Pollo” GALLARDO y Morena, nuestro vecino rumbo al altiplano mexicano, ya suma en lo que va del año 367 homicidios violentos, uno más que en el mismo periodo del año pasado.
Nuevo León, ahí donde SAMUEL GARCÍA presume y presume la ola naranja, los muertos violentos ya se cuentan por 643 en el año, cuando en el mismo periodo del 2021, en que gobernaba JAIME RODRÍGUEZ “El Bronco” en el mismo lapso iban 395; por ahí de 250 más.
Pegado al Golfo de México, nuestro vecino que pega con Tampico, Veracruz de CUITLAHUAC GARCÍA, también de Morena, lleva en el año 497 homicidios dolosos, mientras que en el 2021 iban para entonces 558, es decir una reducción de casi nada.
Los tres estados con los que colindamos están peor o igual en inseguridad respecto al año anterior, mientras que Tamaulipas, gobernado por el panista FRANCISCO JAVIER GARCÍA CABEZA DE VACA se perfila para entregar buenos números y hasta podría presumir que este año ha sido menos, mucho menos violento que el 2021.
Me explico, en el 2021 para estas fechas, Tamaulipas ya sumaba 294 homicidios dolosos, una cifra menor incluso que en el 2020, pero este año sigue la tendencia a la baja y hasta antier se contabilizaban apenas 238 homicidios violentos en lo que va del año, es decir alrededor del 20 por ciento menos.
Reitero que es importante manejar estas cifras en el contexto nacional, pero sobre todo en el contexto local, porque el gobernador electo AMÉRICO VILLARREAL ANAYA ha manifestado en campaña y luego del 5 de junio, su determinación de cambiar la estrategia de seguridad en Tamaulipas.
Por eso, si tomamos como diagnóstico las cifras que indican que en Tamaulipas se ha disminuido considerablemente el delito de homicidio doloso, que es el que refleja en mayor medida la violencia de un estado, la nueva estrategia tendría que llevarnos a pacificar casi al cien por ciento a la Entidad.
Si se cambia la estrategia, reitero, el argumento no sería precisamente que la que hoy se aplica no esté funcionando, porque los números dicen que si, números que hay que decirlo, son los que proporciona el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Ciudadana de la 4T.
Por lo pronto, si de números se trata, bien podríamos recomendar a los tamaulipecos que viajan a Monterrey, a cualquier ciudad jarocha o al estado de San Luis Potosí, que tengan muchas precauciones, porque van de un estado más seguro y en tierras vecinas, hoy está chillando la víbora de la inseguridad.
Hay que reconocer…
Si hay que reconocer que el presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR tiene una insuperable capacidad para decir tonterías, polemizar y evadir responsabilidades.
Ayer superó todas las que ha dicho en el sexenio, soltó que si los Estados Unidos repatría a JULIÁN ASSANGE y lo condenan, él encabezará una campaña para que en ese país se desmonte la estatua de la libertad, porque estará claro que en gringolandia no las hay.
Es el AMLO que se queja de injerencias de los EU, el que pide que no se metan en las cosas de México, el que hoy defiende a un periodista extranjero acusado de espionaje y todos los días ataca a los comunicadores del país que lo cuestionan.
¿Se imaginan la campaña de AMLO por todo el mundo y el EU para que se retire la estatua de la libertad?, ¿de verdad no les entra la duda ni tantito de que el presidente no está al cien por ciento en sus cabales?.
POR MELITÓN GARCÍA DE LA ROSA