CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- A cinco días del aniversario 12 de la masacre de 72 migrantes en San Fernando, la primera que puso a la entidad en el ojo público internacional, Tamaulipas sigue siendo paso obligado para miles de extranjeros que sin documentos oficiales, buscan llegar a Estados Unidos. Al menos así lo indican los números oficiales de las autoridades.
La Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación, da cuenta que de enero a junio de este año, fueron presentados y canalizados 7 mil 664 extranjeros que no contaban con papeles oficiales.
El desglose indica que fueron 7 mil 456 los migrantes presentados y 208 canalizados; dos fueron deportados a sus países de origen, mientras que mil 050 fueron devueltos por retorno asistido.
Destacando que entre los migrantes interceptados en los primeros seis meses del año de 0 a 17 años de edad, es decir, menores de edad, sumaron 53, mismos que fueron devueltos a sus países de origen con asistencia.
La Secretaría de Gobernación reporta que, en el primer semestre, a 441 extranjeros se les expidió una tarjeta de residencia temporal, mientras que otros 269 ya son residentes permanentes en Tamaulipas.
El informe de la Unidad de Política Migratoria señala que a 4 mil 395 migrantes se les otorgó algún tipo de información para orientarlos, mientras que a 4 mil 395 tuvieron acceso a asistencia social.
Pese a los peligros a los que tienen que enfrentar por los grupos criminales, además de las adversas condiciones climáticas que tienen que enfrentar, los extranjeros continúan llegando todos los días.
Elementos del Grupo Beta del Instituto Nacional de Migración (INM) de la secretaría de Gobernación, recuperaron en los primeros cinco meses del año, 37 cuerpos de migrantes que perdieron la vida en Coahuila, Baja California, Veracruz y Tamaulipas, en su intento por llegar a Estados Unidos.
En el caso de Tamaulipas se reportó la muerte de un migrante que perdió la vida al intentar cruzar las aguas del Río Bravo por Matamoros, 24 más en Piedras negras y ocho en Piedras Negras, Coahuila, también fallecieron ahogados.
Otro cadáver se localizó en el área serrana de Tijuana, Baja California y tres en la localidad Costa La Congregación, en Acayucan, Veracruz.
A una semana de que se puso fin al programa “Quédate en México”, el cual exigía a los buscadores de asilo en Estados Unidos, permanecer en México, mientras sus solicitudes se resolvían, aún hay varios miles de migrantes viviendo, principalmente en la frontera de Tamaulipas.
En el caso de Reynosa, hay entre 9 mil y 11 mil migrantes, aseguró el alcalde, Carlos Peña Ortiz, mientras que dentro de los centros de migrantes hay alrededor de 2 mil 500, “hay unos 8 mil que se tratan de incorporar a la economía local y otros que tratan de cruzar al lado americano”, señaló.
Mientras en Nuevo Laredo, habría alrededor de mil 100 migrantes de 2 mil 800 que llegaron a tener en ese municipio, aseguró la alcaldesa Carmen Lilia Canturosas Villarreal, quien apuntó que desde el viernes, son 100 los migrantes que cruzan a Laredo, Texas, cada día para solicitar asilo humanitario en ese país.
En Reynosa, la atención a los migrantes que buscan refugio mientras esperan la oportunidad de solicitar asilo en Estados Unidos, recae principalmente en asociaciones privadas, religiosas, donde se les brinda estancia, algunas comidas y atención médica.
Sin embargo, ante la llegada constante de migrantes, los recursos siempre son limitados, “hicimos un paquete de 21 millones de pesos para lo que resta del año y donde nosotros vamos a estar apoyando a asociaciones civiles que están dando el cuidado a estos migrantes”, señaló el alcalde de Reynosa.
Carlos Peña apuntó que son dos principales las casas de migrantes, una de ellas que dirige la Sister Norma Pimentel, la otra, Senda de Vida del Pastor Héctor Silva, donde se encuentran la mayor parte de los migrantes que no cuentan con hogar en el municipio.
Lo mismo sucede en Nuevo Laredo, donde se asignan recursos mensuales a las casas de migrantes, “tengo que reconocer la ayuda de las asociaciones civiles que han estado en coordinación, de la diócesis que también nos ha apoyado mucho como Gobierno municipal, no tenemos migrantes en la calle, no duerme nadie en la calle”.
Carmen Lilia Canturosas explicó que por el tiempo en que han estado en la ciudad esperando ser llamados para solicitar asilo a Estados Unidos, muchos ya cuentan con permiso de trabajo.
“En el día, ellos salen a comprar, convivir, muchos de ellos tienen permiso de trabajo, nos han estado apoyando en servicios públicos, donde les dimos trabajo y tuvieran un ingreso”, precisando que son alrededor de 50 personas, mientras que otros se han empleado con contratistas en obras públicas.
En cuanto al tema de inseguridad hacia los migrantes, la alcaldesa aseguró que todo está “tranquilo”, “la realidad es que ha estado tranquilo este tema, no tengo nada en contra qué decir de ese tema, estamos trabajando tranquilamente y también los migrantes están tranquilos”.
Mientras que en Reynosa, Carlos Peña señaló que se solicitó el apoyo a la Federación a través de la Guardia Nacional y a la 8va Zona Militar que se encuentra en Reynosa, para reforzar la seguridad para los extranjeros que se encuentran en la ciudad.
Por Perla Reséndez
Expreso-La Razón