Basado en las condiciones políticas que vienen, Morena no solo debe pensar en afianzar al nuevo gobierno, respaldarlo y reaccionar a los ataques que reciba, el partido debe reflexionar, después del 3 de septiembre, sobre la carrera que viene por el 2024.
Desde el 2023, se conocerá la nueva camada de Alcaldes, Diputados Locales, Diputados Federales y Senadores que saldrán de Morena; algunos, seguramente, figuras ya experimentadas como Olga Sosa, pero otros como el diputado Local Beto Granados, serán figuras que tendrá los reflectores.
Beto Granados, tuvo en la recta final del primer año de la legislatura, una participación que fue determinante, por la posición que tomó la fracción, pero también lo hizo en la campaña de Gobernador donde su operación política y particularmente en el distrito 10 de matamoros, donde los votos para Morena el 5 de junio marcaron un hecho histórico.
Operadores como Granados, tienen esa carta de presentación frente al partido y será determinante para que en el 2024, Morena tenga a operadores que garanticen los triunfos en los Ayuntamientos y en el Congreso Local.
Y deberá hacerlo con mucho tacto, porque también hay municipios muy competidos, pero por los mismos aspirantes de Morena.
Por ejemplo en Reynosa, Makito, no solo quiere la reelección, buscaría tener mando y si no es él, entonces proponer a su candidato. Pero en esta puja electoral, con seguridad van a estar José Ramón Gómez Leal, Humberto Prieto, Armando Zertuche y sume a los que han tenido un papel muy visto al interior de este partido.
Lo mismo va pasar en Nuevo Laredo, Río Bravo, en Altamira, no se diga en ciudad Madero donde uno de los adversarios de su propio partido como es Oseguera va buscar imponer a su candidato y sus candidatos al Congreso, con la diferencia de que en todos esos municipios, ahora habrá un voto de calidad como es el gobernador.
En Morena les llama, opinar, en el PRI dedazo y en el PAN designación, pero ese voto de calidad va pesar.
Lo primero que deberá hacer Morena, es arreglar su conflicto interno en los distritos donde tendrá que repetir su elección de Consejeros y posteriormente entre el 3 y 4 de septiembre, elegir al nuevo Comité Directivo Estatal.
La nueva actitud
A la clase política de Morena le llamó la atención que la prensa estuviera en las sillas de enfrente y en la parte central del escenario, el lunes pasado, cuando el gobernador electo dio su mensaje para dar a conocer los trabajos del Comité para la entrega recepción con el gobierno saliente.
Incluso Américo Villarreal, pidió tener un lugar, al extremo de la fila de sillas centrales donde estaban los medios de comunicación y que pudieran tener un lugar estratégico para sus transmisiones, videos, fotografías y poder grabar audios.
Eso llamó la atención, porque por muchos años a la prensa se le mantenía a un extremo de los escenarios, o al final de los salones y con vallas que impedían el paso; prácticamente encerrados en un corral.
No hubo nadie que le impidiera el trabajo a los medios de comunicación en ese primer evento dirigido a la sociedad y a la clase política de Morena.
Seguramente fue difícil para quienes estaban encargados de la logística y la seguridad de las principales figuras políticas, porque hubo un acercamiento directo, que por años no se vivía.+
El peor gobernador que ha tenido Tamaulipas Egidio Torre, implementó con marcado acto, los cercos contra la prensa y el gobierno panista mantuvo a los reporteros de las diferentes fuentes de información a la distancia, tanto en eventos oficiales e incluso políticos.
Aunado a que este evento, del gobernador electo, sirvió para decirle a la ciudadanía que está listo para asumir el poder, y decirle a la clase política que será firme, también se vio un trato más digno a la prensa, ojalá que ese criterio se mantenga todo el sexenio.
Por Arturo Rosas H.