VICTORIA, TAM.- La Policía Estatal de Tamaulipas terminará la administración 2016-2022 con 800 elementos menos, entre los que destacan los que no aprobaron los exámenes de control y confianza, otros que participaron en actos de corrupción o abandonaron las filas y, en los casos más graves, quienes cometieron asesinatos.
“Ocho elementos los hemos procesado y entregado a la autoridad ministerial por falta grave”, reconoció a mitad de julio pasado, el responsable de Seguridad Pública de Tamaulipas, José Jorge Ontiveros Molina.
La corporación contaba este año 2022 con 4 mil 600 oficiales, y esa sería la fuerza que se entregará a la nueva administración.
Ocho meses antes de que arrancara la administración de Gobierno del Estado, el 1 de octubre de 2016, autoridades federales daban a conocer la fría cifra de 2 mandos policiales reprobados de entre 98 en Tamaulipas, la que auguraba una de las principales problemáticas de la Policía Estatal a lo largo del sexenio: la falta de confianza en un porcentaje de sus elementos.
El reporte de finales de enero de 2016 incluía a 88 agentes estatales reprobados, de entre 3 mil 33 en activo, lo que representaba apenas un 3 por ciento.
Sin embargo, por bajo que fuera cualquier porcentaje de policías estatales “malos”, bastaba para ubicar “en el ojo del huracán” a la corporación incluso a nivel internacional.
Todavía 6 años después, en febrero de este 2022, el Gobierno del Estado se vio obligado a emprender una limpia de policías que inició en Nuevo Laredo y Ciudad Victoria.
“El Gobierno de Tamaulipas inició la revisión operativa y administrativa de las corporaciones de Tránsito municipal”, informó en un comunicado. Sustentó la medida en Ley de Seguridad Pública del Estado de Tamaulipas y explicó que los operativos eran en respuesta a “peticiones de los mandos de las fuerzas armadas federales y estatales que han detectado probables irregularidades en la conducta de personal de Tránsito que pudiera tener vínculos con grupos delictivos”.
Matamoros, Ciudad Madero y Tampico ya habían estado bajo esta lupa años atrás. Un antecedente grave justificaba cualquier intento por mejorar la corporación de seguridad estatal: 12 policías habían participado en una matanza de 19 migrantes en Camargo, el 22 de enero de 2021.
A finales de ese año, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública dio a conocer que 696 agentes estatales reprobaron los exámenes de control y confianza, de entre 7 mil 739 de Seguridad Pública, Prevención y Reinserción Social y Seguridad Pública Municipal.
Esta problemática ya era grave un año antes de que iniciara el ahora agonizante sexenio 2016-2022.
En septiembre de 2015, más de 2 mil policías fueron baja por no acreditar dichos exámenes, de entre 10 mil elementos de los cuerpos de Seguridad Pública tamaulipecos. La baja incluyó a desertores que recibían entrenamiento militar en San Gertrudis, Chihuahua y que por lo tanto no se presentaron a los exámenes.
La falta de personal de Seguridad Estatal confiable “le pegó” también a la Coordinación Regional de la Zona Sur.
En su Reclutamiento para la Universidad de Seguridad y Justicia de Tamaulipas, el 52 por ciento de los candidatos reprobaron en control y confianza. En 2017, la Encuesta Nacional de Estándares de Capacitación y Profesionalización Policial incluyó a mil 631 oficiales de Altamira, Ciudad Madero, Hidalgo, El Mante, Nuevo Laredo, Reynosa, Río Bravo, San Fernando, Soto la Marina, Tampico y Victoria, de un Estado de Fuerza de 5 mil 216 elementos.
De la muestra, el 77.7 por ciento tuvo algún grado de sobrepeso u obesidad de acuerdo con sus niveles de Índice de Masa Corporal, problema que se agregó al de desconfianza.
También un 18.3 por ciento padeció alguna enfermedad crónica durante 2017. En un 9.8 por ciento se trató de hipertensión arterial.
Además el 50.2 por ciento sufrió alguna afectación en su salud debido a sus actividades laborales; y el 31 por ciento experimentó aumento o disminución de peso en ese año.
En descargo, si a nivel nacional el 58 por ciento de los policías tenía 39 años o menos, Tamaulipas superó superó el promedio con 64.9 por ciento.
“Por lo que es posible afirmar que se trata de corporaciones policiales estatales mayoritariamente integradas por jóvenes”, destacó la encuesta.
POR MAGDIEL HERNÁNDEZ