Desde mediados de la década pasada, se registra una sobrepoblación de especies salvajes que en los últimos años empezó a agudizarse en Tamaulipas.
A consecuencia de ello, hoy en día existe una gran cantidad de animales salvajes en las inmediaciones de la zona urbana.
El principal ejemplo de ello, es el marrano feral o salvaje, mamífero de la familia de porcinos que es un problema grave en la región noreste de Mexico.
Por ello, la entidad está dentro de la región donde la especie ha siniestrado el medio ambiente, cultivos establecidos y áreas habitables.
De acuerdo a lo señalado por el comisionado de Caza y Pesca del gobierno de Tamaulipas, Luis Eduardo García Reyes, es desde hace ocho años que esa población de cerdos empezó a incrementarse en forma exagerada hasta tener un descontrol que no hace posible su contabilización.
Pero lo que sí se puede estimar es que sea una densidad de más de 1 millón de esos animales salvajes que sigue causando efectos negativos en muchos sectores.
Reportes pasados de autoridades de Medio Ambiente en el Estado, detallan que en el vecino Estado de Texas existe una población de entre 1.8 a los 3.4 millones de marranos ferales, lo que sería una cantidad parecida en nuestra frontera , parte del centro-norte tamaulipeco y costa de Soto la Marina.
García Reyes dijo a Expreso que esa es la única especie que tienen una constante batalla, principalmente en la frontera chica, pues causa destrozos en sembradíos y hasta en zonas rurales y urbanas.
“Tenemos un problema severo con el marrano feral, la estadística no tenemos aún porque estamos en la actividad con el guajolote, pero ya recibimos los primeros informes por prestadores de servicios o de las UMAS, entonces ya listos los informes tendríamos datos reales”.
“Es una especie diferente al jabalí, se le conoce como marrano salvaje, marrano europeo y la verdad; tenemos un grave daño con ese especie principalmente en la frontera porque arrasa con todo y es donde más lo tenemos, ahí en la frontera chica, en áreas como San Fernando, en Soto la Marina por la costa”, dijo García Reyes.
¿QUÉ HACER?
El funcionario estatal dijo que se está realizando una labor coordinada con la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT), a través de la Facultad de Veterinaria, con que les están en vías de proyecto para estudiar el animal y verificar si puede ser o no comestible para su libre caza.
“Es un caso bastante complicado, muy difícil, pues en Estados Unidos no se ha podido erradicar por completo está plaga, allá está catalogada como especie invasora”.
“Y bajo esos estudios que queremos hacer conjunto a la UAT, queremos ver cuál es la factibilidad de ser comestibles o no, normalmente hay quienes lo consumen, pero a lo que sabemos es que si trae varias enfermedades y bacterias”.
Destacó que ya se está trabajando en el programa de erradicación o control de la especie junto a la máxima casa de estudios junto a su área a dirigir que es la Comisión de Caza y Pesca Tamaulipas.
Se pretende que este año sea cuando arranque el proyecto y la libre caza de este cerdo sea una realidad a fin de contener su sobrepoblación.
POR ANTONIO H. MANDUJANO