ALTAMIRA, TAMAULIPAS.- Padres de familia que llevaron a sus hijos a las escuela de Altamira este miércoles, se mostraron inconformes por la suspensión de clases.
En la Secundaria Técnica Número 63 “Fidel Velázquez Sánchez”, localizada en la colonia Serapio Venegas, los alumnos empezaron a llegar desde temprana hora, pero en la entrada fueron regresados por los maestros.
“Que lleguen a un acuerdo para que los niños no resulten afectados, los alumnos son los más afectados por todo esto, es urgente que la autoridad ponga orden”, mencionó el padre de familia, Armando Santos.
Los profesores estarán en los planteles educativos para cumplir con el horario laboral, otros estarán en la toma de las instalaciones del Centro Regional de Desarrollo Educativo (Crede) Altamira.
En otras escuelas del sector Miramar, se permitió que los alumnos estuvieran un par de horas en las aulas en lo que se comunicaban con los padres para decirles sobre la suspensión de clases.
“Me dormí temprano y ya no vi las redes sociales, me levanté temprano y cuando llegué me dijeron que no había clases, no me dijeron cuando habría nuevamente y me regresaron”, mencionó el alumno de tercer grado de secundaria, Gerardo Sánchez.
Por las calles aledañas a las escuelas, se pudo observar a varias madres de familia que regresaban con sus hijos a las casas, tampoco se enteraron sobre el paro de labores que anunció el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación.
“No tengo un teléfono con WhatsApp y no me enteré de que no habría clases, hasta que llegamos al portón nos avisaron y que no saben hasta cuándo”, relató María Guadalupe, madre de familia de la colonia Nuevo Tampico.
Durante la noche del martes, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, convocó a los maestros desde la noche del martes a suspender las clases.
“Se convoca a todo el Magisterio de Tamaulipas para que el día de mañana (miércoles) entremos en la fase 2: paro general de labores en todos los niveles, apelo a su liderazgo para hacer efectiva la instrucción de nuestro líder Profr. Arnulfo Rodríguez Treviño”.
Por Óscar Figueroa
La Razón