TAMPICO, TAM.- La familia Galarza lleva más de 60 años colocando el nacimiento del niño Jesús, en donde hay más de mil figuras de todo tipo de material.
La misma ciudadanía lo ha llamado como «el más grande de Tamaulipas» debido a la extensión que tiene y la cantidad de piezas que se utilizan.
Este domicilio se ubica en calle General Corona número 5, de la colonia Campbell.
Este hogar está lleno de historia, muchas personas lo conocen y saben que al llegar ahí siempre saldrán con una sonrisa por la admiración de quien prepara el nacimiento.
Alicia Galarza, jefa de familia indicó que esta tradición la inició su mamá hace 60 años y ella se ha encargado de seguirla, pues es muy importante celebrar el nacimiento del niño Dios.
Apegada a la iglesia católica, sigue al pie de la letra la tradición y reconoció que para ella es importante dedicarle de su tiempo a este nacimiento.
«Este nacimiento es dedicado a este niño Dios, tiene un aproximado de 120 años, es una reliquia para nosotros como familia, para nosotros representa la Navidad».
Desde hace varios años, lo instala en compañía de su esposo, Adrián Gutiérrez. Sin embargo, este año fue diferente debido a que el presenta problemas de salud y ella se ha dedicado a cuidarlo.
Entre risas y tristeza mencionó que armó todo en tiempo récord, aproximadamente en 10 días y sin ayuda de alguien más.
Para esta Navidad pidió mucha salud, para ella, para su marido y toda su familia.
«Espero pasarla bien, que se logre hacer la fiesta al niño, como cada año lo hacemos. Le estamos pidiendo salud, lo demás corre por cuenta de cada quien, para mí siempre ha sido primordial la salud».
El nacimiento cuenta con infinidad de figuras de diferentes materiales, pero lo que llama la atención son los cocodrilos y mapaches.
Ante esto, dijo que no pueden faltar, ya que la zona sur es conocida por estos animales.
Fiesta por el nacimiento del niño Dios
Le gusta celebrar esta fecha, por lo tanto invitó a la población en general a concentrarse en su hogar el próximo 25 de diciembre.
Reconoció que ella prepara la comida, compra refrescos, instala mesas y sillas, para que la ciudadanía disfrute de la fiesta.
«Hago una invitación a todas las personas que quieran asistir, se le llama acostada de niño Dios, va a ser el 25 de diciembre, vendrán los danzantes a las 4:00 de la tarde».
Aclaró que no se cobra la entrada ni mucho menos los alimentos, ella únicamente quiere compartir su alegría con las demás personas.
POR JAVIER CORTÉS
