Si no hay cambios en el calendario de Morena, este mismo jueves se conocerán los candidatos de ese partido para el Senado de la República y las ocho diputaciones federales de Tamaulipas.
Casi al mismo tiempo, se confirmaría que el Partido Verde postulará sus propias fórmulas para la Cámara Alta, y hasta donde se sabe, lo mismo haría el Partido del Trabajo.
Así, es casi un hecho que en la boleta del 2 de junio aparecerán como candidatos “verdes”, Eugenio Hernández Flores, en la primera fórmula, y Maki Ortiz en la segunda posición.
En las últimas horas del 2023, se insistía en que la primera candidatura de Morena está lista para la Secretaria del Trabajo, Olga Sosa, y la segunda seguía en disputa, entre aspirantes como José Ramón Gómez Leal, Marco Batarse Ferrel, e incluso se había vuelto a poner sobre la mesa el nombre de Américo Villarreal Santiago.
Queda claro que la noticia más llamativa de este proceso electoral sería el regreso a la actividad política del ex gobernador, Hernández Flores.
Sobra decir que detrás de esta jugada política del PVEM no hay una ruptura con Morena y la 4T, sino una estrategia para que los aliados cierren paso a la oposición, donde ya se perfilan Imelda Sanmiguel y Ramiro Ramos Salinas, como primera y segunda fórmula.
Más claro: si el Partido Verde logra el segundo lugar en la elección, el PAN tamaulipeco quedaría fuera del Senado.
Pero la estrategia de la 4T, como todo en la política, no está exenta de algunos riesgos y cierta dosis de incertidumbre.
Por ejemplo, cómo se va a utilizar el aparato municipal de Reynosa, bajo control de Maki Ortiz, a través de su hijo Carlos Peña, quien buscará la reelección como candidato de Morena.
¿A qué partido se irán los votos de la estructura que controla Maki Ortiz en la boleta por el Senado? La respuesta es obvia.
Como sea, la decisión parece tomada porque más allá de las consideraciones estratégicas para esta elección, es muy claro que una de las razones principales ha sido cerrar toda posibilidad de que la ex alcaldesa de Reynosa fuera candidata por Morena.
Los independientes no avanzan
De los 15 aspirantes a obtener una candidatura independiente, a excepción de uno, el resto están muy lejos de cumplir su objetivo si se toman en cuenta los apoyos ciudadanos que han logrado recolectar y entregar al Instituto Nacional Electoral.
El ex alcalde panista de Tula (de tristes recuerdos para ese municipio) Lenin Coronado, es el único que reporta avances como para tomarse en cuenta, con un 19.65% de las firmas solicitadas.
El resto no ha podido llegar ni al 1 por ciento, y la gran mayoría de hecho, no ha logrado un solo apoyo verificado dentro del listado nominal.
El triste caso de los aspirantes a independientes confirma que la ciudadanía está desencantado de esta fórmula y que, guste o no, en el sistema democrático con el que contamos, es casi imposible sacarle la vuelta a los partidos políticos.
POR MIGUEL DOMÍNGUEZ FLORES