CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- El bombardeo de nubes será una estrategia que el Gobierno de Tamaulipas continuará implementando en 2024 en todo el estado para inducir lluvias.
La sequía ha alcanzado niveles críticos, suspendiendo los riegos en el sector agrícola, afectando la red doméstica, y causando estragos en el ecosistema, entre otros problemas derivados de la escasez de agua.
Productores de diversas regiones del estado han expresado que esta práctica ha resultado positiva, respaldando la continuación de la inyección de químicos en las nubes para fomentar las precipitaciones.
“La inyección de nubes con químicos ha sido efectiva; recordemos que tuvimos buenas precipitaciones beneficiosas en aquellos meses”, afirmó Ángel Lara Martínez, productor del centro de Tamaulipas y líder territorial de la Confederación Nacional Campesina.
El gobierno de Tamaulipas contrató el año pasado a una empresa privada para realizar un total de 100 vuelos de estimulación de lluvias durante los próximos cuatro años de la administración estatal.
El último bombardeo, según los registros de Protección Civil Tamaulipas, tuvo lugar a mediados de octubre de 2023, después de casi seis meses sin llevarse a cabo. En esta ocasión, se atendió un polígono de 946,277 hectáreas en parte del centro y la región cañera tamaulipeca, abarcando 9 municipios de dichas regiones.
El último vuelo, ejecutado por el avión Turbocomander 840, propiedad del Gobierno de Tamaulipas y bautizado como “Tláloc”, llevó 90 litros de una solución química llamada “RainMaker”. Despegó para realizar un vuelo de 90 minutos con el objetivo de propiciar lluvias beneficiosas para casi 1 millón de hectáreas.
El vuelo abarcó los municipios de Llera, Gómez Farías, Xicoténcatl, El Mante, Antigüo Morelos, Villagrán, Hidalgo, Güémez y Victoria, buscando generar lluvias que favorecieran el almacenamiento en las presas Pedro J. Méndez, Vicente Guerrero, Emilio Portes Gil y Ramiro C. Dorantes.
Este fue el primer vuelo de los 100 contratados con una empresa particular, que se ejecutarán durante el resto de la administración estatal.
Por Antonio H. Mandujano
EXPRESO-LA RAZON