Durante más de 8 años, concesionarios y choferes del transporte público han tenido que solventar los aumentos aplicados a los insumos propios del transporte público, con una tarifa de 9 pesos.
El último ajuste al pasaje se realizó en el 2015 y durante todo ese tiempo los precios de la gasolina, llantas, refacciones y demás han incrementado varias veces.
Por ello, los operadores y dueños de concesiones insisten en un aumento a la tarifa general del servicio que prestan.
Al utilizar diariamente sus unidades, el desgaste de las mismas es constante por lo que es necesario cambiar llantas, refacciones, entre otros.
En el 2015, una llanta nueva costaba de 650 a 700 pesos y en la actualidad cuesta 1600 pesos.
Hace 8 años, para reparar un neumático había que desembolsar de 25 a 30 pesos y hoy deben pagarse 80 pesos aproximadamente.
A mediados de la década pasada, con 135 mil o 145 mil pesos, podía adquirirse un automóvil nuevo.
Actualmente, el precio va de los 250 mil pesos a los 300 mil pesos.
En ese tiempo, el litro de gasolina pasó de los 13 a los 22, casi 23 pesos.
Los trabajadores del volante también tienen que enfrentar otros gastos como el seguro de la unidad, rótulas, terminales, suspensión, expresó Miguel Molina, delegado de la ruta Centro Colonias.
«El seguro de daños a terceros sale casi en 4 mil pesos, el pago depende, hay por seis meses y hay por año, las terminales salen en 350 pesos, los estabilizadores salen como en mil pesos, las suspensiones son lo más caros, unos 4 mil pesos», indicó.
Cuatro litros de aceite para motor, más el filtro y la afinación cuesta en promedio 1800 pesos.
A lo anterior se suman los pagos que deben hacerse a la oficina fiscal, como el engomado por el cual desembolsan actualmente mil 300 pesos.
También está incluida la revista documental cuyo costo es de 305 pesos.
Y como todo ciudadano, el trabajador del volante tiene que comprar los productos de la canasta básica que también han tenido un alza esos más de 8 años.
«Esto ya no es negocio», expresó con preocupación el representante choferil.
Hasta el momento, desconoce cuándo podría autorizarse el aumento al pasaje.
Pero de lo que sí tiene conocimiento es que varios operadores han dejado esa actividad al no ser redituable.
Tan solo en esa ruta, se han presentado 10 casos.
Benigno Solís/La Razón