CD. VICTORIA, TAM.- Durante el primer mes del año, el número de emergencia recibió llamadas cada día para denunciar incidentes relacionados con violencia entre parejas, manteniendo ocupada a la Guardia Estatal de Género y otras corporaciones de seguridad en Tamaulipas.
De las 19,387 llamadas que se recibieron en el país relacionadas con este tipo de violencia, las 687 llamados de auxilio en Tamaulipas, ubicaron a la entidad en el lugar nueve a nivel nacional.
Las llamadas relacionadas con incidentes de violencia familiar sumaron 1,015 en el arranque del año. A razón de 33 llamadas al día para denunciar este tipo de situaciones, los focos rojos para las autoridades de prevención y atención de seguridad, están en este tipo de conflictos que pueden escalar en otro tipo de incidentes.
La violencia de parejas por ejemplo, puede escalar a delitos de lesiones dolosas, homicidios y feminicidios, siendo estos dos últimos, los casos más extremos de la violencia contra las mujeres.
En 2023 las víctimas de feminicidio sumaron 18, siendo junio el más letal para las mujeres, al registrarse cinco víctimas. En seis casos se usó arma blanca para perpetrar el crimen y en 12 casos más otro elemento, no especificado en los datos del Secretariado.
Y aunque al mes de enero de este año no se registran feminicidios, según los datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública que se nutre de los datos de las Fiscalías de los estados, hay cuatro homicidios de mujeres. Con ello, la entidad se ubica en el lugar nueve a nivel nacional en homicidios, junto a otras tres entidades, donde las mujeres han muerto porque otra persona así lo decidió de manera deliberada sumando 201 víctimas en enero del 2024.
Las víctimas de lesiones culposas, estas son las que fueron heridas con un arma de fuego, arma blanca o algún otro elemento de manera intencionada en Tamaulipas, fueron 67 en el arranque del año, con lo que la entidad se coloca en el lugar 20 en este delito en el país.
Como ya se dijo, las cifras de denuncias no son acordes a las llamadas de auxilio que se reciben en los números de emergencia del 911 las diferentes corporaciones de seguridad y auxilio.
En el primer mes en Tamaulipas las llamadas relacionadas con incidentes de violencia contra la mujer sumaron 214. El catálogo nacional de incidentes de emergencia define la violencia como todo acto violento que tenga o pueda tener como resultado daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico contra la mujer. Se incluye las amenazas de tales actos, coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la privada.
En el primer mes las llamadas relacionadas con abuso sexual sumaron ocho, 15 más por hostigamiento sexual o acoso, mientras otras tres llamadas de auxilio a los números de emergencia alertaban sobre incidentes de violación.
Sin embargo, no todas las llamadas al 911 concluyen en una denuncia ante la autoridad, los datos de la Fiscalía General de Justicia de Tamaulipas de delitos en el mes de enero, donde las víctimas son niñas y adolescentes señalan la corrupción de menores con tres casos y uno más de trata de personas, todos ellos donde las víctimas son menores de 17 años.
El delito de violación suma 33 víctimas en la entidad de 1,454 que se registraron en enero a nivel nacional, según los datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública. Mientras que los datos duros de la Fiscalía indica que en enero de este 2024 se registraron 564 delitos relacionados con violencia familiar. Con 15.0 delitos por cada 100 mil habitantes, Tamaulipas apenas se ubica por debajo de la media nacional (15.7 delitos).
Aunque todavía no se cuenta con encuestas especializadas para analizar la violencia, específicamente en contra de niñas, niños y adolescentes, la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) 2021 permite aproximar las situaciones de violencia durante los primeros años de vida.
Esta encuesta capta información de manera retrospectiva de las experiencias de violencia que vivieron las mujeres de 15 años y más durante su infancia. De ellas, 41.8 por ciento manifestó haber vivido alguna situación de violencia en su infancia (antes de cumplir 15 años), en tanto que 54.7 por ciento no experimentó violencia y 3.4 por ciento dijo no recordar.
Durante la infancia, alrededor de 12.4 millones de mujeres de 15 años y más (12.6 %) experimentaron violencia sexual. Los principales actos de violencia fueron: le tocaron sus partes íntimas o la obligaron a tocar las partes íntimas de otra persona sin su consentimiento (9.5 %), intentaron forzarla a tener relaciones sexuales (4.7 %) y la obligaron a mostrar sus partes íntimas y/ o a mirar las partes íntimas de otra persona (4.0 %).
Si bien esos actos fueron los que tuvieron el mayor número de menciones, ello no implica que las mujeres no hubieran experimentado alguna otra situación de violencia de manera simultánea. Las principales personas agresoras sexuales de las mujeres durante su infancia fueron una o un tío, con 20.8 por ciento, una o un primo, con 17.4 por ciento y un no familiar (vecino, conocido), con 15.8 por ciento. Las personas que menos se mencionaron como agresoras sexuales fueron la o el abuelo, con 3.6 por ciento, otro, con 3.3 por ciento y la madre, con 0.6 por ciento.
La exposición a entornos violentos durante los primeros años de vida se ha relacionado no sólo con la normalización de la violencia, sino con su reproducción en etapas posteriores. Al respecto, Naciones Unidas menciona que hay una mayor propensión al uso de la violencia contra las parejas y a ejercer maltrato, entre las personas adultas quienes, durante la niñez, fueron testigos de la violencia de sus padres hacia sus madres.
La violencia se debe considerar como “un proceso y no como un evento, ya que es constitutiva de un conjunto de experiencias que con frecuencia no son estáticas ni ocurren solo en una ocasión”, señala la ONU.
Al normalizarse o interiorizarse, la violencia que se atestigua o experimenta en las primeras etapas de vida, se puede trasladar y reproducir en otros ámbitos. Se estima que, en México, 51.3 por ciento de las mujeres de 15 años y más atestiguó y/o experimentó algún evento de violencia física y/o psicológica durante su infancia, 78.2 por ciento de ellas reportó tener hijos o hijas y el 54.7 por ciento ha insultado y/o pegado a sus hijos o hijas. Por otro lado, de 48.7 por ciento de mujeres que no atestiguó ni experimentó violencia psicológica y/o física durante su infancia, 69.6 por ciento tiene hijos o hijas y 24.8 por ciento de ellas los o las ha insultado y/o golpeado.
Así se observa que las mujeres que vivieron violencia en la infancia son quienes ejercen, en mayor medida, violencia en contra de sus hijos o hijas, lo que evidencia un proceso de reproducción de violencia de acuerdo con la ENDIREH.
POR PERLA RESÉNDEZ