CIUDAD VICTORIA, TAM.- Es latente el riesgo de un rebrote de COVID-19 en Tamaulipas , por lo que continúa el programa de vacunación en todos los centros de salud, donde se aplica la vacuna Abdala a los adultos y la Pfizer a los niños, reconoció el secretario de Salud del estado, Vicente Joel Hernández Navarro.
De acuerdo con el boletín informativo de la Secretaría de Salud, en lo que va del año se han registrado 35 casos y 8 fallecimientos. Es en el municipio de Reynosa donde se reportan más casos, con un total de 14 y 3 fallecidos.
En Victoria van 3 casos sin fallecimientos, en Tampico 4 casos con 1 fallecido, en Altamira 4 casos y 1 fallecido, en Madero 3 casos y 1 fallecido, en Nuevo Laredo 1 caso y 1 fallecido, en Casas 1 caso y 1 fallecido, mientras que Jaumave, Río Bravo y Camargo reportan 1 caso cada uno.
Hernández Navarro admitió que sigue habiendo COVID-19 y que las personas que se han protegido con las vacunas tienen un mayor grado de protección contra complicaciones.
Sin embargo, insistió en que las personas con enfermedades crónicas deben seguir tomando precauciones independientemente de estar vacunadas.
“Vemos gente que sistemáticamente usa su cubrebocas y en algunos lugares lo exigen para poder entrar.
Por eso hay más conciencia de los cuidados y, afortunadamente, menos casos”, comentó.
Reveló que el 80% de la población en Tamaulipas está protegida contra el COVID-19, gracias a que se han vacunado y han recibido los refuerzos.
“La vacuna que se aplica actualmente es la Abdala, y a los niños se les aplica la Pfizer. Hay suficientes vacunas, no hemos dejado de vacunar.
Las personas pueden acudir al centro de salud más cercano para solicitarla”, señaló.
El responsable de la salud en el estado aseguró que siempre existen circunstancias de riesgo de un rebrote de COVID-19, por lo que se mantienen las medidas preventivas. “Estamos viendo las repercusiones en las personas que tuvieron la enfermedad, así como la situación de calor.
Las personas que tienen COVID-19 son más propensas a sufrir neuropatías y a aumentar su riesgo coronario.
Les pedimos que, si tienen disminución en su oxigenación, tomen medidas, cambien sus hábitos alimenticios, de ejercicio y de manejo del estrés”, concluyó.
Por Salvador Valadez C.
EXPRESO-LA RAZON