CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.- La Comisión Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (COMAPA) identificó las áreas más problemáticas en la ciudad de Victoria por los constantes taponamientos de grasa y aceite en la red de drenaje.
Estas obstrucciones, provocadas principalmente por residuos vertidos por comercios de alimentos, han causado socavones y daños en las infraestructuras viales.
Medidas de Control y Prevención
COMAPA ha intensificado el monitoreo sobre más de 300 establecimientos en la ciudad para evitar que tiren grasas y aceites en la red de alcantarillado.
Eliseo García Leal, Gerente General de COMAPA Victoria, destacó que estos taponamientos han costado millones en reparaciones.
Como medida preventiva, se ha establecido una cuota de 3 mil pesos a cada negocio, la cual puede reducirse si se demuestra el buen estado de las trampas de grasa instaladas.
“Siguen los problemas con los negocios de comida que están tirando grasa en la tubería, por lo que se les está multando para que tengan trampas de grasa y les den mantenimiento para evitar que descarguen grasas al drenaje”, declaró García Leal.
A la fecha, no se han impuesto multas, pero sí numerosas notificaciones, instando a los negocios a evitar prácticas que dañen la infraestructura.
La cuota de 3 mil pesos puede ser bonificada tras una inspección que confirme el correcto funcionamiento de las trampas de grasa.
Avances Tecnológicos
Para abordar estos problemas, COMAPA ha adquirido un nuevo camión Vactor, sumándose a los dos ya existentes. Este equipo especializado ha acelerado las reparaciones y la limpieza de la red de drenaje, facilitando la gestión de las obstrucciones de grasa.
“Tras un mes de haber recibido un camión nuevo Vactor, ahora contamos con tres camiones Vactor, uno usado que se compró hace tres meses, uno del municipio y el nuevo. Con esto hemos mejorado significativamente nuestra capacidad de respuesta”, explicó García Leal.
La incorporación de ese equipo ha sido crucial para combatir los taponamientos y realizar reparaciones eficientes en las zonas más afectadas, asegurando así una mejor calidad de vida para los habitantes de Victoria.
Por. Raúl Lopez Garcia
EXPRESO-LA RAZON
