Mañana es cumpleaños de Francisco Javier García Cabeza de Vaca, el gobernador electo, pero para mortificación de muchos no habrá festejo multitudinario, por lo que hartos tendrán que esperar otra oportunidad para acercarse al depositario del Poder Ejecutivo a partir del 1 de octubre.
Así es mis queridos boes, sé de muchos que esperaban con ansia el cumple de Cabeza de Vaca para aprovechar el abrazo y entregarle tarjetitas, currículum, su jurarle amor eterno con el fin de ser trepados al tren de la alternancia; pero al menos este sábado no se va a poder.
Hasta donde sé, el gobernador electo ha decidido festejar en familia, disfrutar a su esposa e hijas y evitar la muchedumbre que desde el 5 de junio le persigue con fines futuristas.
Y es que Cabeza de Vaca sabe que este cumpleaños es el último, al menos de los próximos seis, que podrá pasar tranquilo, sin tanta gente rodeándolo, sin la pose de quienes quieren quedar bien, sin el escrutinio de las lentes.
Por eso los regalos, los halagos, los abrazos y amores fingidos van a tener que guardarse este sábado, porque con Cabeza de Vaca estarán sólo los suyos, sus consanguíneos y el resto de las felicitaciones podrán sin duda hacérselas llegar a través de sus redes sociales.
Por lo pronto también hay que decir que si bien Cabeza de Vaca festejará en el calor de su familia, no es que ande muy tranquilo, porque mientras ve, revisa, analiza los números que le entregan en el proceso de recepción de la administración estatal, también trae en la mente cada detalle del evento de toma de protesta.
Es la primera vez que ambos casos se dan empalmados, porque en los sexenios anteriores había más de cinco meses de espacio entre la elección y la toma de protesta; eso daba tiempo de sobra para organizar los dos eventos sin tanta prisa.
Por cierto también hay que decir que pese a que el gobernador electo recibió ayer muchas invitaciones para asistir como invitado a las ceremonias del Grito de Independencia, también prefirió darse un respiro y pasarla en familia, ya el año entrante él y los suyos van a estar en el balcón principal del Palacio de Gobierno.
Sobre los eventos de toma de protesta, hay que decir que comenzaron a enviarse notificaciones de invitación al masivo del Polyforum a donde llegará Cabeza de Vaca ya en su calidad de Gobernador Constitucional.
Obvio decir que las invitaciones ahora son muy cotizadas, porque muchos quieren ser partícipes de un evento histórico que culmina con la hegemonía del PRI por más de 85 años en Tamaulipas.
También hay que decir que a 14 días de que arranque la administración panista, no hay nada para nadie en lo que al gabinete se refiere.
Un día sí y otro también salen listas de los que supuestamente serán secretarios de estado, pero la realidad es que nadie de ellos sabe a qué área y en qué posición dentro de la misma.
Como lo ha dicho el propio César Verástegui, será un día antes o dos que sepamos por fin los nombres de los que acompañarán a Cabeza de Vaca en el gobierno azul.
Tampoco se sabe qué personajes de la política nacional van a acompañar a Cabeza de Vaca, cuántos gobernadores mexicanos, qué funcionarios gringos y quiénes de la plana mayor del PAN estarán en Victoria para el evento.
Me mueve el morbo también como a muchos saber si estarán todos los diputados federales en las primeras filas como dice la costumbre, si estarán todos los candidatos que compitieron contra el ganador como también marca la regla no escrita.
De entre estos Gustavo Cárdenas Gutiérrez y Baltazar Hinojosa, uno del Movimiento Ciudadano y el otro del PRI fueron de los más virulentos contra el gobernador electo en campaña, por lo que habrá bastantes en el evento esperando que las cámaras los tomen a la hora de que se les mencione.
La violencia y el grito…
Hoy debe ser noticia lo que haya pasado anoche en los gritos en el país, por lo pronto desde muy temprano las televisoras y agencias de información daban cuenta de la violencia que se había desatado en Oaxaca donde policías y maestros de la CNTE con quienes peleaban los espacios donde se daría el grito.
En las imágenes de veían cohetones, gritos y truenos que podrían haber sido disparos, sin que al cierre de este espacio se haya sabido del saldo de heridos o cosas peores.
Al mismo tiempo en la CDMX varios contingentes se acercaban al Zócalo con el fin de aguarle la fiesta al presidente Enrique Peña Nieto del que entre otras cosas pedían su renuncia.
Se esperaba por lo tanto una noche de rechifla en el ex DF. Hoy sin duda leeremos los saldos de lo que haya pasado a lo largo del país.
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