De niño, solía escuchar una frase de la abuela explicando lo que parecía extraño o algo que no podíamos entender:
“Todo tiene su porqué y su por dónde”…
Y tenía razón. Aunque en ocasiones se presentan situaciones que en la superficie no parezcan tener explicación lógica, se perciben fuera de lugar o también pueden verse inoportunas, en una buena parte tienen fundamento. Y tarde o temprano se descubre.
Si me permite, expondré la razón de este intento de reflexión.
Ayer, dando lectura al portal de un diario de circulación nacional especializado en economía de todos tamaños, me llamó la atención una entrevista al ex Secretario del Tesoro de Estados Unidos, Lawrence -Larry– Summers, en la cual abordó en forma especial el tema de la revisión del Tratado de Libre Comercio –TLC o TLCAN– entre México y ese país, en el marco de la convención bancaria que se celebra en Acapulco.
Una frase de ese personaje es en mi percepción, lapidaria:
“No hay mejor regalo que Estados Unidos le puede dar a China que eliminar el TLCAN con México”. Y fue aún más preciso: “Acabar con el Tratado significaría una producción menos eficiente y le restaría competitividad frente a Asia”.
¿Por qué poner sobre la mesa algo en lo cual Tamaulipas aparentemente no tiene posibilidades de influir?
Sucede que el gobierno de Tamaulipas anunció que este jueves el gobernador Francisco García inicia con empresarios y algunos colaboradores una visita a China, para promover al Estado como sede de inversiones del país oriental.
Debo reconocer que en un principio la mencionada gira de trabajo parecía en mi opinión no tener el peso necesario para atraer capital asiático, pero lo asentado por un financiero experto como Larry Summers es un tapabocas monumental a quienes lo veían así, incluido su servidor.
Es un hecho que el presidente estadounidense Donald Trump no variará su política antimexicana y casi está escrito que eliminará o por lo menos ajustará drásticamente el TLC en perjuicio de nuestra país, por lo cual el adelantarse como lo hace el gobernador Francisco García a fortalecer una relación económica con China para presentarle al Estado como respuesta a sus intereses, es una acción que ni siquiera el presidente Enrique Peña ha realizado.
Sí, tenía razón la abuela: Todo tiene su porqué y por dónde…
¡Uy el coco!
Y para cerrar el tema en este espacio, en la misma entrevista Summers parece anticipar el triunfo de Andrés Manuel López Obrador en 2018, cuando opina que si Estados Unidos sigue con políticas hostiles hacia México, es posible que aquí se elija como presidente en ese año a un candidato populista con parecido a los líderes venezolanos. Y puntualizó: “De hecho, es posible imaginar que si Estados Unidos permaneciera en ese camino, podría encontrarse con un gobierno en la tradición de Hugo Chávez en Venezuela. Y China colocó 65,000 millones de dólares detrás de ese gobierno”.
Más claro, ni el agua original de La Peñita…
Palabras para recordar
Ayer, en los actos para honrar la memoria de Luis Donaldo Colosio, un fragmento de su memorable discurso del 6 de marzo de 1994 resonó con claridad:
“Hoy somos la opción que ofrece el cambio con responsabilidad. Somos la opción que sabe de los resultados de los programas, de sus aciertos y de sus errores.
Somos la opción capaz de conservar lo que ha tenido éxito y somos la opción de encontrar nuevos caminos de solución para los problemas pendientes.
No entendemos el cambio como un rechazo indiscriminado a lo que otros hicieron. Lo entendemos como la capacidad para aprender, para innovar, para superar las deficiencias y los obstáculos.
¡Cambiemos, sí! ¡Cambiemos! ¡Pero hagámoslo con responsabilidad, consolidando los avances reales que se han alcanzado!…”
Ojalá que la voz de Colosio siga siendo escuchada…
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