El domingo, un conductor de autobús palestino fue encontrado ahorcado en un autobús en la misma ciudad, en circunstancias poco claras, dijo en rueda de prensa aquí el portavoz del ACNUDH, Rupert Colville.
Además, al menos otras seis personas -entre ellos cinco israelíes y un ecuatoriano- fueron asesinados en el último mes en supuestos ataques de automóviles dirigidos hacia la gente y ataques con cuchillos.
Al menos, agregó Colville, tres sospechosos palestinos murieron cuando las fuerzas de seguridad israelíes reaccionaron a estos incidentes.
En respuesta, Israel anunció la demolición de seis casas de palestinos presuntamente implicados en algunos de las acciones anteriores.
El ACNUDH pidió a las autoridades israelíes que «se contengan, que no realicen actos punitivos colectivos, como demoler casas, y que tengan en cuenta las posibles consecuencias inflamatorias de sus actos».
Asimismo, llamó a todas las partes a refrenarse y contenerse para frenar la ola de violencia en la que están sumidos Israel y los Territorios Palestinos Ocupados.
«Hacemos un llamado a israelíes y palestinos para actuar con moderación y a basarse en el respeto a los derechos humanos”, concluyó Colville.