VICTORIA, Tamaulipas.- Esta tarde familiares y amigos despidieron los restos mortales de Eduardo Javier Fuentes Acevedo, en el Parque Funeral del Refugio.
Poco después de las 3 de la tarde inició la misa de cuerpo presente, en donde no hubo coro sino que los presentes entonaron los canticos solemnes de una manera muy emotiva.
Frente a los rostros de los presentes, llenos de tristeza como de fe, el sacerdote habló en varios momentos de la ceremonia religiosa sobre la esperanza que deben tener en que Fuentes Acevedo ahora disfruta de la vida eterna.
Después de leer un fragmento del Evangelio según San Juan, el cual recuerda cuando Jesucristo dijo que «nadie va al Padre si no es por mi», el sacerdote dio a los presentes el emotivo mensaje de que la muerte no es el fracaso de la vida, sino el acontecimiento que nos lleva al «Reino de Dios».
Los asistentes, que mostraban pesar, pero también gran entereza, escucharon respetuosamente al párroco. Recordó el celebrante que la oración debe ser constante en la vida de un cristiano y sobre todo en momentos como la muerte de un ser querido, no como una válvula de escape, sino como una forma de acercarse a Dios para sobrellevar correctamente cualquier dolor.
Uno de los momentos mas tiernos fue cuando los presentes se dieron el saludo de paz fundiéndose en cálidos abrazos mostrando apoyo mutuo. También la Comunión fue un momento lleno de fe, donde resonó el canto «Entre tus manos».
Al concluir la misa, en la cual varios presentes se quedaron afuera del recinto por falta de espacio, un grupo de Mariachi acompañó la carrosa fúnebre entonando canciones como «El Rey» hasta que inició el entierro poco antes de las cuatro de la tarde, cuando el ambiente se impregnó del llanto de los presentes.
Antes de descender el féretro un trio de guitarras cantó «El Andariego» y «Te acordarás de mi» y algunos presentes hicieron patente su cariño a «El Profe» Fuentes uniéndose cantando.
Posteriormente el Mariachi volvió a entonar melodías, como «Hermoso cariño» y «Amor eterno», opacado por las voces de los asistentes que, con lagrimas en los ojos, cantaban tiernamente manifestando su amor a Fuentes Acevedo como a sus familiares.
Poco después de las 4:30 de la tarde del día 4 de diciembre de 2014, los familiares y amigos de Eduardo Javier Fuentes Acevedo le dieron el último adiós.
Descanse en Paz.
