Capitalismo de compadres se le llama a aquellos que entran a este estatus de poderío económico gracias a su cercanía con el poder.
Al menos así le llaman un grupo de periodistas a lo que está pasando en México donde personas allegadas a quien toma las decisiones y reparte el pastel del presupuesto se hacen de fortunas en metálico y bienes inmuebles al amparo del poder.
La lista de los agraciados por el poder del priísmo es larga, pero hasta ahora hemos visto a nivel nacional dos de ellos, a la esposa de Enrique Peña Nieto y a su secretario de Hacienda Luis Videgaray, quien resulta que también compró una casita a través de Higa, la misma empresa que le vendió su mansión a Angélica Rivera.
Al conocer los pormenores de la compra de la casa del secretario peñista destaca uno de los puntos, que Videgaray compró este bien inmueble al empresario consentido de Peña Nieto en el año del 2012 en Malinalco, una zona residencial cercana al D.F.
Pues bien, la casita tuvo un costo de 581 mil dólares a pagar en 18 años. Para ello Videgaray contrató con la misma empresa que Angélica Rivera, una hipoteca de 532 mil dólares, lo que equivaldría a más de siete millones de pesos, si se tasa el dólar a 13.50.
De acuerdo con las cláusulas de contrato del crédito, éste se pagaría a 18 años. Pero no, en México los funcionarios de primer nivel hacen maravillas con sus sueldos y resulta que el señor Videgaray terminó de pagar la deuda contraída en tan sólo dos años.
Pues cuánto gana el susodicho para que haya pagado tan rápidamente esa cifra millonaria. O es que hizo arreglos con el dueño de la empresa y se la adjudicó mediante la contratación de obras y servicios con cargo al erario federal.
Esa es la incógnita.
El capitalismo de compadres que se acostumbra en el país es cierto y comprobable, pero no significa que quienes lo practican sean removidos de sus puestos y sometidos a juicio. La impunidad continúa.
MEDITA RENUNCIAR
Homero de la Garza, secretario de Desarrollo Social está en una disyuntiva, no sabe si renunciará a su cargo. Las vacaciones decembrinas pueden servir a funcionarios federales y locales para pensar su permanencia en los puestos.
Mientras las fichas electorales se reacomodan y gente que se consideraba descartada, como Antonio Martínez, se hace presente entre los periodistas enviándoles regalos navideños que incluyen un disco grabado por el ex secretario de gobierno.
Por su parte Felipe Garza Narváez ve cómo sus bonos aumentan y las encuestas lo presentan como una opción viable para la candidatura a la diputación.
En tanto la pregunta está en el aire: ¿Quién sigue en la lista de descalificados?
Y quien soltó la bomba, ¿está consciente de los daños colaterales que acarreará sobre todo el descrédito del PRI ante el electorado?
LEY CONTRA LA VIOLENCIA HACIA LA MUJER
Los diputados locales aprobaron la Ley para Prevenir, Atender, Sancionar y Erradicar la violencia contra las mujeres.
La legislatura encabezada por Ramiro Ramos tiene que destinar recursos para lograr que esta ley sea una realidad porque la violencia hacia la mujer no se limita a los golpes físicos, también hay violencia estructural y económica, política también y para eliminarla se requiere algo más que una ley, se necesita financiamiento y en el presupuesto del año entrante habrá que ver cuánto destinaron a este rubro.
CONTRA LAS ADICCIONES
En la reunión con Manuel Mondragón y Kalb, titular de la Comisión Nacional contra las Adicciones, Norberto Treviño refrendó el compromiso de la Secretaría de Salud de contribuir a prevenir y tratar las adicciones sobre todo en jóvenes.
“Se ha impartido 4 mil 405 pláticas preventivas a 95 mil adolescentes sobre adicciones, violencia entre pares y embarazo en adolescentes. Se realizaron 71 mil tamizajes en los que se detectaron a 9 mil 107 con riesgo a consumo de sustancias adictivas, a quienes se les dio atención inmediata en los Centros de Atención Primaria en Adicciones CAPA”, explicó el funcionario.
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