MÉXICO, D.F.- El pleno de la Cámara de Diputados avaló en lo general, con 299 votos a favor, 83 en contra y tres abstenciones, el dictamen con el que expide la Ley de Transición Energética, que es una ley reglamentaria de la reforma constitucional promulgada en diciembre de 2013.
La nueva ley, que fue enviada al Senado, busca regular el aprovechamiento sustentable de la energía, y las obligaciones en materia de energías limpias y de reducción de emisiones contaminantes de la industria eléctrica, manteniendo la competitividad de los sectores productivos.
Además establece la meta nacional de participación de energías limpias en la generación de energía eléctrica, la cual se prevé se incremente de manera gradual de 25% para 2018 a un 35% en 2024.
Establece un marco jurídico para que el Estado que permita la acción coordinada de todos los participantes del sector energético con el fin de lograr la reducción de emisiones contaminantes al menor costo y con mayor bienestar social posible.
Según el secretario de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados, el panista Rubén Camarillo, con este dictamen se reducirá la generación de residuos y emisiones contaminantes para cuidar el ambiente sin afectar el desarrollo y la eficiencia económica del país.
«La ley se propone ordenar conceptos básicos del cuidado tanto del medio ambiente, como del sistema climático global, inherente a la industria eléctrica, para llevarlos a un nivel de aplicación efectivo, acompañando el desarrollo económico del país», dijo.
Agregó que al dictaminar el tema, las comisiones parlamentarias se propusieron para «buscar la reducción de los impactos ambientales, pero no a costa de la eficiencia económica, que en el caso del Sistema Eléctrico Nacional está entrando en un nuevo ciclo del desarrollo al impulso de la reforma energética».
«El objetivo es disminuir la generación de gases y compuestos efecto invernadero, obtener mayor eficiencia en el uso de recursos naturales, disminuir la generación de residuos y emisiones, así como atenuar la huella de carbono en todos los procesos relacionados, considerando la realidad de la industria eléctrica, que, por primera vez, se ha abierto a las inversiones privadas», subrayó.