MATAMOROS, Tamaulipas.- Un joven murió calcinado luego de salvar a su madre y hermanitos cuando su vivienda del fraccionamiento Casa Blanca se quemaba, a consecuencia de un corto circuito.
El occiso se llamaba Pedro Antonio Núñez Gracia, de 21 años, quien residía en la calle Rabat 107.
Por la madrugada falleció internado en el Seguro Social de la calle Sexta con quemaduras en brazos, piernas y cara.
El siniestro ocurrió a las 00:30 horas de ayer.
Personal de Bomberos sofocó el fuego que arrasó minutos antes con todos los muebles del hogar.
Paramédicos de la Cruz Roja auxiliaron a los heridos.
Intoxicados y con algunas quemaduras en sus cuerpos resultaron María Guadalupe Gracia, su hija América y otro menor que ingresó al nosocomio local.
María Guadalupe está grave y con quemaduras en su cuerpo y por el humo que inhaló.
Cuando el fuego empezó en el interior de la residencia, la viuda Yésica María Cantú escuchó a su suegra María Guadalupe que desde su cuarto gritaba «¡Pedroooo!».
Cuando Pedro Antonio fue en su auxilio alcanzó a sacar a su madre y a los menores.
Paramédicos y bomberos rescataron con vida a Pedro Antonio, un empleado de la Cervecería Corona, en el baño de la segunda planta, quien de urgencia fue internado en la clínica del Instituto Mexicano Seguro Social (IMSS), de la calle Sexta, pero minutos más tarde los médicos reportaron que había fallecido.
Vecinos con cubetas y botes con agua intentaron apagar el fuego, pero era imposible. Los Bomberos tuvieron que luchar por horas para sofocar el incendio.
Los vecinos al ver a la familia atrapada entre el fuego, hicieran un hoyo en la pared para poder rescatarla.
María Guadalupe, de 49 años, una adolescente de 13 y un niño de 5 fueron trasladados de urgencia a las clínicas del IMSS y al nosocomio local.
Alfredo Rodríguez González, titular de la Agencia Séptima del Ministerio Público, dio fe del cadáver del joven y ordenó que fuera trasladado al Servicio Médico Forense para la práctica de la autopsia de ley.




