MATAMOROS, Tamaulipas.- La Comisión de Asuntos Fronterizos de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio (Concanaco), hará las gestiones correspondientes para que la normatividad que anunció el Banco de México, que exige que los centros cambiarios en la frontera lleven un estricto control en la venta de dólares sin importar la cantidad, sea derogada, porque atenta en contra del libre mercado y perjudica seriamente a los negocios de la zona fronteriza, donde el dólar es una moneda de circulación corriente.
Christian Pérez Cosío, director de la Cámara Nacional de Comercio, dijo, que que sigue habiendo confusión sobre el cumplimiento de esa normatividad entre los propietarios de las casas de cambio, que por ese año no están obligados a llevar ningún control sobre la venta de dólares, sino que las reglas entrarán en operación hasta enero del 2016.
El acuerdo del Banco de México, que fue publicado en el Diario de la Federación, da a conocer la normatividad a la que estarán sujetos los centros cambiarios, pero aclara que las reglas entran en vigor hasta enero del 2016 y no del 2015.
No obstante que falta un año para que entren en función esas nuevas reglas, dijo el Director de la Cámara Nacional de Comercio, que hay una oposición generalizada a lo largo de toda la franja fronteriza, sobre la obligación de llevar un control sobre la venta de dólares, sin importar la cantidad, pidiendo a las personas una identificación oficial para tomar sus datos personales y su domicilio.
Afirmó que esa medida se tomó en cuenta, porque hay un desconocimiento de cual es la dinámica económica de la frontera, donde el dólar es una moneda de circulación normal.
En cualquier negocio, hasta un micro changarro, toma un dólar para vender algún producto.
Por eso es incongruente que se pretende llevar un control tan rígido para la compra-venta de dólares.
Esas reglas solamente se imponen en otros países, como en la frontera sur de los Estados Unidos, cuando la persona compra o vende más de 3 mil dólares.
En ventas inferiores no hay ninguna restricción en las casas de cambio particulares el la frontera sur de los Estados Unidos.
