Al Estado de la estrella solitaria ha llegado un nuevo gobernador, Greg Abbott, republicano como su antecesor Rick Perry y todavía más conservador y radical que éste, pero con una notable diferencia que puede ser determinante para la región: posee una mayor sensibilidad política.
Su primer paso para vigilar la frontera así lo indica. Un objetivo priorirtario para él es retirar a la Guardia Nacional de la línea divisoria con México, pero sólo para reemplazarla por un cuerpo policíaco igualmente rígido pero con un imagen pública positiva, tanto nacional como internacional, que da la percepción de una mano más suave, pero igualmente implacable: Los “Texas Rangers”. Una institución de seguridad con un prestigio similar al de Scotland Yard, de Inglaterra.
Queda claro, la relación entre Texas y México definitivamente no fue la mejor durante los 14 años de gobierno del republicano Rick Perry, pero la que el sucesor Greg Abbott pretende tener podría ser mejor simplemente porque comparten muchos intereses y el nuevo gobernante sabe que “el futuro entre Texas y México es muy prometedor”. Esencialmente, en el plano económico derivado del petróleo.
EDIMBURG, Texas.- El interés de Abbott por México -—y por el Valle del Río Grande— es indiscutible. El martes tomó posesión y el jueves ya estaba en esta zona. Atender la región, largamente considerada como la puerta trasera de Texas, está entre sus prioridades y hacer lo que al estado competa —y exigir su parte a la Federación— para asegurar la frontera, también…“es su responsabilidad”.
Por lo pronto, se apresta a presentar un proyecto de ley ante la 84 ava. Legislatura de Texas que tiene que ver con la seguridad.
“Yo tengo mi plan ya escrito”. La idea, es pedir suficientes fondos económicos al Congreso para la contratación de más agentes estatales y decirle adiós a la Guardia Nacional de Texas.
Desde mediados del 2014 y traídos por una maniobra de Rick Perry desde junio del 2014 la Guardia Nacional se sumó a la vigilancia en la frontera específicamente en la del Condado Hidalgo, vecino de Díaz Ordaz, Reynosa, Río Bravo y parte de la ribereña tamaulipeca.
La idea de Abbott es contratar más oficiales para el Departamento de Seguridad Pública de Texas y aumentar la cantidad de agentes en una de las divisiones policiacas más prestigiosas del mundo que pertenecen a DPS Texas: los Texas Rangers.
Creados en 1835; cuando Texas fue una República —tras la separación de México y antes de anexarse a los Estados Unidos— los Texas Rangers sirvieron casi una década como una fuerza paramilitar. Su prestigio es tan grande como el de la europea Scotland Yard.
“Necesito hacerlo para asegurar la frontera”, dijo Abbott sobre su plan.
Con la llegada de más agentes estatales (Troopers y Rangers), el nuevo Gobernador desaparecerá la Guardia Nacional de la frontera, sin embargo, no será de un día para otro.
A menos de un mes de dejar el poder Rick Perry se aseguró que por lo menos continuarían por el primer semestre de este 2015. De los mil soldados que llegaron en el 2014 empezarían a retirarse paulatinamente a partir de este enero.
Sin embargo y como lo aseguró Abbott, la presencia de policías estatales aumentará, además de la vigilancia con aeronaves y cámaras de video.
Para el próximo mes de marzo sólo quedarán 200 tropas militares pero para agosto quedarían completamente substituidos por policías estatales.
—La relación con México, ¿cómo será bajo su gobierno?- pregunta la reportera en una breve charla.
Sin duda Abbott sabe de lo que habla, su voz es pausada y clara; gusta de ver a su interlocutor a los ojos.
“Buscamos una relación muy productiva con México… hay tantas cosas que podemos trabajar juntos”.
Económicamente. “Mira lo que está pasando en el sector de energía en México”, dice refiriéndose a la Reforma Energética impulsada por el presidente Enrique Peña Nieto y aprobada por los legisladores.
Se refiere también al intercambio comercial y educativo, ahora con la nueva Universidad Valle del Río Grande que preparará a los nuevos doctores del sur de Texas y norte de México y a futuros abogados.
“Yo veo un futuro prometedor entre Texas y México”.
Y con su primer visita al Valle de Texas y su primer nombramiento dado al Juez del Condado Cameron, Carlos Cascos, —un matamorense nacionalizado estadounidense– como Secretario de Estado (Secretario General de Gobierno) demuestra que su interés es genuino.
UNA REUNIÓN EN PUERTA
De entrada, de acuerdo a fuentes dignas de crédito, el gobernador Egidio Torre Cantú y su homólogo texano Abbott, pronto sostendrían su primer encuentro con Austin como sede y el tema a analizar, también de acuerdo a las mismas fuentes, será Reforma Energetica y su impacto común en Texas y Tamaulipas. Al respecto, el gobierno tamaulipeco ha mostrado un profundo interés en construir una relación bilateral con su vecino estado norteño, con miras a equilibrar en todos los terrenos posibles, los avances y beneficios que pueden acarrear a ambas entidades la explotación de hidrocarburos en la región.