TAMPICO, Tamaulipas.- Los perdedores en la definición de candidatos a diputados federales no han sido sólo los aspirantes que se quedaron en el camino en los partidos políticos. Con ellos, caminan en una pendiente los viejos cotos de influencia de los sectores de empresarios, obreros y campesinos.
El poder hegemónico de las centrales obreras y rurales, así como la mano dura del capital privado, perdieron peso en el proceso que hoy se vive y en el caso de los dos prmeros, virtualmente se han extinguido.
La mano de los empresarios no ha pesado en la designación de los candidatos a diputados federales de las primeras tres fuerzas electorales tamaulipecas, coinciden analistas políticos y ex autoridades electorales.
Para ellos, las dirigencias nacionales han orquestado los amarres necesarios con el poder político y en mucho menor medida, con el económico local, para que los aspirantes salgan a la calle fortalecidos, pero dejando como segunda tarea el conseguir el respaldo territorial.
Desde hace 15 años que el sistema de partidos mexicano comenzó a transformar el método de selección de candidatos, obligado por las reformas político-electorales, apunta el ex consejero del Instituto Federal Electoral (IFE), Leonardo Valdés Zurita. En el ensayo “La democracia interna de los partidos políticos en México” muestra el viraje que provocaron los cambios a la ley aprobados en 1996. No obstante, señala que la caída del PRI, primero en varios estados y luego a nivel nacional, marcó un parteaguas. Éste se replica en los partidos de oposición que fueron ganando espacios en entidades, como Baja California, Nuevo León, Querétaro, entre otras, pero también los perdieron.
CUENTAN,
PERO NO PESAN
Conforme a la visión de los analistas Héctor Garcés Baltiérrez y José Luis Hernández Chávez, tras la definición de las candidaturas de unidad, en el caso del Partido Revolucionario Institucional (PRI), y en la víspera de las resoluciones en Acción Nacional y Movimiento Ciudadano, los ‘hombres y mujeres de dinero’ influyen, “pero no es crucial en la decisión que toma cada instituto político”.
Una muestra de que el peso específico de los magnates no es el único que importa se vive en el distrito 7, integrada por los municipios de Aldama, Altamira y la parte norte de Ciudad Madero. Ahí la fuerza del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) venció a los aspirantes altamirenses con etiqueta de la iniciativa privada. en su lugar el gremio impuso al ahora alcalde con licencia, Esdras Romero Vega. La presión del secretario y senador Carlos Romero Deschamps fue efectiva.
Situación contraria se observó en el caso de Mercedes del Carmen Guillén Vicente, Alejandro Guevara Cobos, Miguel González Salum, Edgardo Melhem Salinas y María Esther Camargo Félix. El segundo se registró con testigos de honor y chequera, como el constructor Eduardo Vela Ruiz acompañado del ex presidente tampiqueño, Fernando Azcárraga López, y Abelardo Osuna Morales. La cuarteta restante soporta sus aspiraciones en su recorrido por varios puestos y el amarre parcial de los grupos locales priistas.
¿DÓNDE ESTÁN
LA CTM Y LA CNC?
El norte refleja también el distanciamiento empresarial junto al gremio de los trabajadores de la ciudad o del medio rural. En Nuevo Laredo la candidata del tricolor, Yahleel Abdala, es una figura con escasos nexos con el capital privado, mientras que en Reynosa, Esther Camargo descansa todo su historial en el terreno de los políticos tradicionales de la región. Asimismo, en Río Bravo, Édgar Melhem procede de un grupo que nació en el seno comercial pero ha acabado por abrazar completamente a la facción política encavada en la administración pública.
En todos los casos, el drama del olvido se concentra en las que fueron poderosas centrales, CTM y CNC. Aunque en lo corto presumen de una discreta relación con algunos de los candidatos, en realidad no tienen ni la mínima conexión con ellos o ellas y mucho menos influyeron en la definición de los abanderados del Revolucionario.
MC… ¿CABALLO NEGRO?
Aunque la diversidad de los perfiles de los candidatos de Movimiento Ciudadano (MC) sorprenden, en la mayor parte de los casos reúne la mixtura de ser ubicados como ciudadanos con alto poder adquisitivo. La tercera fuerza política en Tamaulipas, liderada por el ex panista Gustavo Cárdenas Gutiérrez, apuesta por presentar una baraja de nombres como la ex diputada Diana Chavira, hermana de Francisco Chavira; el activista Eduardo Cantú Elías, hermano del panista Fernando Cantú; y la regidora Perla Berenice Aguirre Sarmiento. Incluso, Cárdenas ha filtrado que podría invitar a participar con esas siglas a Daniel Sampayo, quien declinó la candidatura del PRI la semana pasada.
“Debemos ciudadanizar la política porque la gente ya está harta de los partidos tradicionales, por lo que Movimiento Ciudadano debe convertirse en una verdadera opción para el electorado de Tamaulipas”, declaró el presidente nacional del partido, Dante Delgado. Agregó que la postulación de activistas por la paz, como la propuesta para Tampico, es un fenómeno que se puede considerar en otros estados del país.
Pese al discurso del experimentado político, el partido naranja presentará en la boleta del distrito 1 y 5 a dos políticos conocidos, que se han empecinado en ocupar diversos cargos públicos. El objetivo principal del MC es arrebatarle el segundo lugar en la votación estatal al Partido Acción Nacional.
SUR, EL ÚLTIMO
REDUCTO DE LA IP
Los blanquizales históricamente se han distinguido por tener en sus filas a prominentes empresarios, que elección tras elección aportan grandes cantidades de dinero. Cada grupo es encabezado por no sólo un hombre de negocios, sino por toda una familia o clanes enteros, que empujan a sus integrantes para alcanzar curules y alcaldías.
Para los comicios de 2015, en el norte y centro del estado las negociaciones para designar los aspirantes las encabeza el senador Francisco Javier García Cabeza de Vaca. El reynosense tiene el control del Comité Directivo Estatal, bajo el mando de César “El Truco” Verástegui.
Sin embargo en el sur la elección pasa por un duelo entre capitales. María Elena Figueroa Smith presume el apoyo de los directivos de Grupo Tampico. Su contrincante, Graciela Guadalupe Tovar Trejo tiene el respaldo de Sergio Salazar, dueño de una gran cadena de laboratorios de análisis médicos.
La certeza de la selección de candidatos se conocerá hasta la noche del 7 de junio. Por ahora, los partidos cierran filas y afinan los pactos que den más soporte a sus aspirantes. Los hombres y mujeres de negocios alistan las chequeras y exponen los temas legislativos que les son de interés por sus actividades. El electorado aguarda la propuesta política de cada uno de los 80 aspirantes.
