EL MANTE, Tam. Tristeza, enfermedad, depresión, problemas, alcoholismo, sólo él lo supo.
Y es que la verdadera razón por la cual don Hilario Amaro Martínez, de 52 años de edad, decidió escapar por la puerta falsa, se la llevó a la tumba.
Para lograr su propósito, el ahora occiso utilizó como «herramienta» un árbol al fondo de su domicilio, ubicado en colonia Industrial, en la ciudad de Xicoténcatl.
Alrededor de las 8 de la mañana, el joven buscó a su padre en su recámara para ofrecerle barbacoa, pero ya no estaba.
Al salir al patio, a lo lejos, vio que algo pendía de un árbol y al acercarse se percató que se trataba de su padre.
Inmediatamente corrió para ayudarlo, pero el cuerpo estaba frío y rígido.
Don Hilario tenía varias horas de haber fallecido.
De acuerdo con las primeras investigaciones, el ahora occiso utilizó una cuerda de naylon, la cual ató a la rama de un árbol y el otro extremo a su cuello.
Se presume que el señor subió al propio árbol y se dejó caer, provocándose mortales lesiones a la altura de las cervicales.
Familiares del ahora occiso reportaron el hallazgo a la central de emergencia 066, solicitando la presencia de las autoridades ministeriales.
Al lugar de los hechos llegaron elementos de la Policía Ministerial del estado, así como peritos en técnicas de campo de la unidad regional de servicios periciales y el agente del Ministerio Público en el municipio de Xicoténcatl.
Luego de que el fiscal dio fe de los hechos, ordenó que el cuerpo fuera trasladado a una funeraria del vecino municipio para que se le practicara la autopsia de rigor.




