Tras la conclusión del periodo de las precampañas electorales que se inició el 10 de enero y terminó el 17 de febrero, ha iniciado el del llamado inter campañas que empezó ayer 19 y llegará a su fin el 4 de abril, lapso durante el cual los candidatos a diputados federales no podrán promocionar su imagen ni hacer proselitismo.
De acuerdo con lo que dispone la ley, a lo largo de ese lapso los partidos políticos pueden hacer propaganda pero sólo de la llamada institucional en la que deberán abstenerse de incluir frases, imágenes, voces o símbolos que pudieran ser constitutivos de propaganda política o electoral, o bien elementos de propaganda personalizados de servidor público alguno.
La disposición legal, parte de las nuevas reglas del juego, afectará significativamente a todos los aspirantes a las curules del palacio legislativo de San Lázaro, ya que en 45 días de no aparecer en los medios de comunicación, además de que perderán presencia y posicionamiento entre la ciudadanía, las preferencias electorales podrían haber sufrido modificaciones.
Como los partidos políticos y los candidatos, durante las campañas electorales las autoridades gubernamentales tampoco podrían difundir los logros de gobierno, ni emitir mensajes sobre programas y acciones que promuevan beneficios a la comunidad. En los relativos a la salud y otros, únicamente está permitido que aparezcan en ellos el nombre de la dependencia y el escudo oficial.
Tienen prohibido, asimismo, utilizar logotipos, slogans o cualquier otra referencia.
El 5 de abril, cuando terminará el ayuno político y arrancarán las campañas electorales, los candidatos a las curules federales empezarán prácticamente de cero al momento en que saldrán a la calle a pedir el voto de los electores.
El proceso de registro ante las autoridades del Instituto Nacional Electoral iniciará el 22 y concluirá el 29 de marzo.
Mientras tanto, los dirigentes, estrategas, asesores, operadores políticos y coordinadores de campaña de los partidos y de los contendientes, tendrán tiempo suficiente para revisar las estructuras electorales, verificar la situación en la que se encuentran y subsanar las eventuales fallas a efecto de estar al cien cuando el árbitro de la competencia de la voz de arranque.
En el caso del ex invencible, otro asunto al que se avocarán en la fase de inter campaña será el de la designación de los candidatos a diputados suplentes en los distritos que están pendientes de definir, como en el de Tampico.
El hecho lamentable, a propósito del INE, es que este aún no maneja ningún proceso político constitucional y ya ha empezado a ser deslegitimado y acusado de oficialista y progubernamental. En la sesión del pasado miércoles, cuando se abordaba el tema de los programas sociales los representantes de siete de los diez partidos políticos, el PRD, el PAN, MORENA, PT, Movimiento Ciudadano, Encuentro Social y Partido Humanista, abandonaron el acto.
Sólo se quedaron el PRI y sus aliados de siempre, el Verde Ecologista y el Partido Nueva Alianza.
A decir de los partidos inconformes, que actuaron de esa forma en protesta por la parcialidad que ha mostrado organismo, los consejeros electorales que simpatizan con el tricolor han convertido el INE en un rehén.
¿Cuál será el desenlace del problema? No tenemos idea, pero para empezar los jerarcas del principales partidos políticos, PRI, PAN y PRD, van sostener una serie de reuniones a efecto de buscarle una salida al caso e impedir que antes del silbatazo inicial los espectadores ya estén calificando al árbitro de haber vendido el partido.
En asuntos de otra índole, muchas personas se encuentran confundidas con la celebración del carnaval del 25 al 3 de marzo. El motivo, que en el caso concreto de Tampico primero haya tenido lugar el miércoles de ceniza y después las carnestolendas, cuando siempre había sido al revés.
Por causas que se ignoran, las autoridades programaron la realización de la tradicional festividad del Rey Momo sin tomar en cuenta que se trata de un evento que tiene fundamento astronómico, como el de la Semana Santa, que debe de efectuarse luego de la primera luna llena que sigue al 21 de marzo.
Por esa razón, el carnaval tiene que tener lugar exactamente 3 días antes del miércoles de ceniza, costumbre que da inicio a la Cuaresma, el cuadragésimo día antes de la Pascua o domingo de la resurrección de Jesús.
Primero es el carnaval o sea los días del la relajación de la carne y el pecado y más tarde la Cuaresma, tiempo de purificación e iluminación.
De acuerdo con el calendario litúrgico del cristianismo, la alteración de las fechas es incorrecto porque no puede ser primero la espiritualidad y posteriormente el destrampe carnavalesco.




