TAMPICO, Tamaulipas.- Hace un año con 11 meses que en la Cámara de Diputados trabaja la Comisión Especial de la Cuenca del Bajo Pánuco. El grupo presidido por los legisladores priistas de la región, Zita Pazzi Maza, Jorge Terán Juárez y Rosalba de la Cruz Requena ha organizado 6 reuniones que costaron 260 mil 688 pesos. En todos los encuentros los participantes de la sociedad civil han expresado su oposición al proyecto Monterrey VI, pero los representantes de veracruzanos, potosinos y tamaulipecos los han ignorado.
La primera manifestación en contra del acueducto que pretende extraer hasta 15 mil litros por segundo del río Tampaón, se dio el uno de agosto de 2013 en la Casa de la Cultura de Pánuco. Al acto asistieron 300 personas entre productores agrícolas, ganaderos, usuarios de la cuenca, empresarios, académicos y activistas de la huasteca. En cambio, sólo 3 de los 10 diputados acudieron, por lo que no hubo quórum legal.
Los legisladores por Veracruz, San Luis Potosí y Tamaulipas, Pazzi Maza, Terán Juárez y de la Cruz Requena, respectivamente, fueron plantados por sus compañeros. Los integrantes que no asistieron fueron Genaro Ruiz Arriaga, María Guadalupe Moctezuma Oviedo, Roberto López González, Antonio García Conejo, Laura Ximena Martel Cantú, María Sanjuana Cerda Franco, María Fernanda Romero Lozano. En la comisión el Partido Revolucionario Institucional (PRI) ostenta la mayoría de elementos, seguido por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), Nueva Alianza y el Verde Ecologista de México.
A pesar de las falta de quórum, tal como estaba programado, ocho expertos participaron. El presidente del Colegio Mexicano de Ingenieros y Arquitectos del Sur de Tamaulipas, Rafael Benavides Osorio; el coordinador técnico de la Comapa zona conurbada, Refugio Delgado Delgado; el investigador de la UAT, Gerardo Sánchez; el presidente de la Asociación Civil Consejo Ciudadano del Estuario del río Pánuco, José Luis León Hurtado; el presidente de la Confederación de Usuarios del Agua del río Pánuco, Alfonso Arroyo Amezcua, entre otros, cuestionaron el acueducto frente a los legisladores.
La respuesta que obtuvo la sociedad civil fue la exposición y promesa de gestionar el dinero necesario para el Pujal-Coy; proyecto añejo que han revivido para usarlo como moneda de cambio por el Monterrey VI. Este plan hidráulico, iniciado en la década de los setenta por el expresidente Luis Echeverría Álvarez, contempla en la primera etapa evitar inundaciones controlando las crecientes del río Pánuco y captar el agua necesaria para irrigar 170 hectáreas de sembradíos en la región. En un segundo momento, se construirían presas en el río Tamesí, Ciudad Valles y Aquismón y se ampliaría el canal Las Ánimas para regar 220 mil hectáreas de 5 municipios. La tercera etapa consideraba la conducción del líquido para abastecer a 68 mil hectáreas distribuidas en San Luis Potosí, Veracruz e Hidalgo. Los asistentes escucharon e insistieron en la necesidad de parar el acueducto.
Nueve días después, el 10 de agosto de 2013, la oposición al proyecto del gobierno de Nuevo León se replicó. En la reunión de trabajo en el Nuevo Centro de Población Ejidal Ponciano Arriaga, Ébano, San Luis Potosí, el representante de los Usuarios del Distrito de Riego 092, José Luis Chong Wong, junto con el productor José Cisneros Mendoza hicieron público el rechazo absoluto a la obra, según muestra el informe de trabajo elaborado y publicado por la misma comisión en el sitio web de la Cámara de Diputados. Las únicas que dieron eco a la exigencia fueron las legisladoras María Guadalupe Moctezuma Oviedo y María Sanjuana Cerda Franco. La postura ciudadana distó mucho de la de Jorge Terán Juárez, Zita Pazzi Maza y Rosalba de la Cruz.
LA RAZÓN intentó en 4 ocasiones comunicarse con los diputados de la región huasteca, para conocer su trabajo en respuesta a las exigencias ciudadanas de prevenir el posible daño ecológico, económico y social que representa la construcción del Monterrey VI. La representante por Mante y municipios aledaños respondió a la llamada, pero dijo no poder atender por encontrarse en reuniones. La misma respuesta dio Terán Juárez, quien todavía es el presidente del grupo especial legislativo, por medio de un asistente. La exalcaldesa de Pánuco, Zita Pazzi, simplemente no contestó las llamadas, ni los mensajes.
Lo único que ha informado la comisión es la supuesta inversión para infraestructura hidroagrícola por 621 millones 681 mil 804.51 pesos. En 2013 se destinaron 73 millones 152 mil 183.39 pesos. Al año siguiente aumentó a 220 millones, 750 mil pesos y para 2015 se etiquetaron dos partidas por 154 millones 999 mil 621.12 pesos y 448 millones 901 mil 804.51 pesos. Además, para tecnificación del riego llegarían 172 millones 780 mil pesos. No obstante, el recorte “preventivo” federal analiza reducir o eliminar estos presupuestos.
En contraparte, ninguno de los representantes a impulsado un Punto de acuerdo o ha lanzado un exhorto en contra del acueducto que afectará a los ciudadanos que representan.
