Día con día vemos en nuestra ciudad que nos faltan muchas cosas: más y mejores vialidades, más alumbrado, mejores servicios públicos, en fin, una larga lista de aspectos que creemos merecer y que sin duda alguna carecemos, sin importar en qué barrio o colonia me haga usted el favor de leerme.
El domingo, por ejemplo, me tocó estar en la cancha que conocemos como la de la Unidad Modelo, colonia al sur de la ciudad, pero que en realidad está enclavada en la colonia Casas Blancas, donde además, convergen las colonias Gutiérrez de Lara, Manuel A. Ravizé, entre otras.
Ahí por ejemplo, se reúnen todos los días a caminar por las mañanas muy temprano, una buena cantidad de vecinos del sector, por las tardes hay una escuelita de fútbol y los fines de semana una liga donde participan un total de 40 equipos, lo que trasladado a personas que utilizan el espacio, nos habla de al menos 3,500 a la semana. ¿Nada mal, no?.
Cuando arribó a este espacio, el titular del Instituto Tamaulipeco del Deporte, Enrique de la Garza Ferrer acompañado por Rubén David Rivera Rodríguez, su mano derecha y director de Desarrollo del Deporte en este mismo instituto, ya eran esperados por una comitiva que les dio la bienvenida, pero que también tenía una muy sana intención al momento de recibirles.
“Ayúdenos con nuestra cancha”, era la voz del pueblo.
Ahondo en este ejemplo porque es el que recientemente me tocó vivir, pero le aseguro que usted se va a identificar cuando continúe la lectura lo relacionará sin duda con algo que ya vivió usted en carne propia en su barrio.
De entrada, las canchas de la Unidad Modelo están en un terreno que es propiedad privada, si la gente que me lo comentó no está equivocada, es propiedad de la Familia Martínez y lo utilizan como espacio deportivo, sin serlo, porque ninguna autoridad en ningún momento ha provisto a esta colonia de un espacio para este fin.
La petición a los funcionarios deportivos consistía en reponer el alumbrado de la cancha y de paso el de la calle que ya no funciona, ayudar a acondicionar estas canchas pues están rodeadas de maleza y de paso de basura, pues además de la falta de cultura e higiene, no hay un solo tambo donde depositar la que se genera a los alrededores.
Si mis cálculos no fallan, el gobierno del estado ha invertido más de 300 millones de pesos directamente en Correcaminos en los últimos cuatro años, ¿para qué? es la pregunta, seguimos donde mismo deportivamente hablando y en cuestión de imagen, para qué le digo.
Para finalizar esta administración, no caería nada mal echar una vuelta al barrio, ver si los ciudadanos cuentan con lugares de sano esparcimiento que a su vez sirven como centros de desarrollo físico y social para prevenir adicciones y conductas delincuenciales.
Una miradita al deporte social con áreas y material deportivo, inyectarle a los torneos bien organizados de cualquiera que sea la disciplina a practicar, sería tal vez una buena inversión ya que donde se intentó y se le metió mucho, pues está más que claro que no funcionó, los ciudadanos exigen atención y me queda claro que hay prioridades.
@luisdariovera
