EL MANTE, Tamaulipas.- De existir lluvias excesivas en los meses de junio y julio, unas 50 mil hectáreas de distintos cultivos en su mayoría de soya, se verían amenazadas y los campesinos con pérdidas por segundo año consecutivo en ciclos similares.
El jefe del Distrito de Desarrollo Rural 161 de la Sagarpa, Antonio Human Adame, dijo que de acuerdo a los pronósticos de la Comisión Nacional del Agua a través del Servicio Meteorológico Nacional, junio y julio serán meses con buenos niveles de lluvia.
Dijo que de entrada, esto es positivo porque permitiría preparar las tierras para la siembra de distintos cultivos como soya y sorgo mayormente; sin embargo, este éxito es únicamente posible si las lluvias aminoran.
“El ciclo primavera-verano pasado, llovió tanto que al final hubo superficie que no se pudo sembrar, si esto vuelve a suceder, un gran porcentaje de las 51 mil hectáreas que se planea sembrar, podrían quedarse así por el exceso de humedad”, dijo.
Recordó que en 2014, las condiciones también fueron de buena humedad, pero después las lluvias en exceso hizo que cambiara en mucho el programa de siembra y que se sembrara apenas la mitad del sorgo que se tenía contemplado. Y que la soya registrara también afectaciones.
Sin embargo, apuntó que de presentarse las lluvias con moderación, estarían ante un buen panorama no solamente los productores agrarios, sino también los pecuarios que han tenido un excelente año.
“El programa de siembra contempla alrededor de 27 mil hectáreas de soya, quizá un poco arriba, de sorgo se contempla alrededor de 18 mil hectáreas y maíz unas 3 mil 500, lo que da alrededor de 50 mil hectáreas de cultivo para el presente ciclo”, dijo.
Ganaderos tienen un excelente año
Contrario al panorama que viene arrastrando el agro por algunos bajos precios y condiciones climatológicas adversas, para el sector ganadero los últimos dos años al ser llovedores, les han traído condiciones favorables.
El jefe de la Sagarpa, dijo que prácticamente todo el invierno llovió, la primavera entró igual con agua y prácticamente, todos los meses han sido de precipitaciones, lo cual ha sido favorable para el sector.
“Los ganaderos viven condiciones favorables, tienen agua, pastos, buenos precios, apoyos de recría, es decir, están atravesando por un mejor momento y a diferencia de los campesinos, para ellos si todo el año llueve es mucho mejor”, dijo.
Agregó que incluso y con la finalidad de incrementar el hato, el Gobierno Federal les está otorgando apoyos para repoblar su hato y a través de esto, tener más ganado disponible y acabar con los problemas que se tienen actualmente de baja población.