GUATEMALA.- El presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, dijo que no renunciará al cargo, luego de que la fiscalía solicitara el retiro de su inmunidad por su presunta participación en un caso de fraude aduanero.
«Declaro categóricamente que rechazo mi vinculación a la misma, haber recibido dinero alguno de esa operación de defraudación aduanera, mi conciencia está tranquila en ese sentido», dijo.
Perez Molina también pidió perdón y reconoció que en su gobierno se realizaron actos de corrupción. «Esto me obligo a pedir disculpa pública y a decir lo que nace del fondo de mi corazón, a pedir perdón a los guatemaltecos», añadió, negando que fuera a renunciar al cargo por estos señalamientos.
La fiscalía y la Comisión Internacional contra la impunidad en Guatemala solicitaron el retiro de la inmunidad de Pérez Molina tras una investigación en la que determinaron que una red de funcionarios y particulares recibía sobornos de empresarios con el fin de ayudarles a evadir impuestos.
Según las evidencias encontradas, los sobornos eran repartidos entre los integrantes de la red. Las autoridades aseguran que Pérez Molina y la ex vicepresidenta Roxana Baldetti estaban a la cabeza de la red.
Baldetti renunció al cargo el pasado 8 de mayo tras su vinculación, y el viernes fue detenida y enviada a prisión por un juez.
La red denominada «La línea» era una estructura liderada supuestamente por Juan Carlos Monzón Rojas, el ahora prófugo ex secretario privado de Baldetti, quien se encargaba de entregar los sobornos al presidente como a la ex vicepresidenta.




