El miércoles, el mundo oficial del sur de Tamaulipas y el propio gobernador EGIDIO TORRE CANTÚ, anduvieron de fiesta con motivo de la visita a la zona de la secretaría de Turismo, CLAUDIA RUIZ MASSIEU, quien recorrió la playa de Miramar y los puntos de atracción turística de Tampico como el centro histórico, el viejo edificio de la Aduana y el Canal de La cortadura.
Se le dieron amplias explicaciones de los proyectos que existen para aprovechar tal patrimonio natural e inmobiliario y la funcionaria ofreció que el Gobierno Federal apoyará con todo su concreción. Pero 24 horas después se anunció que la señora deja tal cartera para irse de Secretaría de Relaciones Exteriores, donde no tendrá oportunidad y tal vez ya ni siquiera le interesará, dar seguimiento a las ofertas expresadas.
La continuidad en los propósitos siempre depende de quienes están involucrados en ellos. Tenemos como ejemplo que ÁLVARO GARZA CANTÚ, casi al término de su gestión municipal, dejó todo listo para que se construyera un parque de diversiones en terrenos circundantes a la Laguna del Carpintero. Pero le sucedió FERNANDO AZCÁRRAGA LÓPEZ quien tiró al bote de la basura tal proyecto.
ARTURO ELIZONDO NARANJO hizo del proyecto del canal de La Cortadura un cimiento para el desarrollo turístico de Tampico, pero sus sucesores no le dieron el debido seguimiento y durante años la obra quedó inconclusa.
Guardadas las proporciones, el cambio en la titularidad del ramo turístico a nivel nacional, también desfasa inevitablemente los planes que con tanto festín se anunciaron el miércoles. Ahora habrá que tratar con el nuevo secretario del ramo que apenas estará entronizándose en los asuntos de su competencia y que para tener en su agenda los asuntos del sur de Tamaulipas tendría que venir a ver lo que se está haciendo y lo que se quiere hacer.
¿Faltó información en el gobierno de Tamaulipas acerca de que venía un cambio inminente que dejaría a nuestra “aliada” sin ninguna injerencia en los temas que aquí trató? ¿Será que ni siquiera CLAUDIA sabía de su enroque?
Queda claro que los canales de comunicación entre las esferas oficiales no se basan siempre en relaciones personales para surtir efectos en las acciones de gobierno, pero ellas son siempre un valor agregado para que se realicen.
Por ello, toda esa tramoya que se armó para recibir a CLAUDIA RUIZ MASSIEU con el consiguiente gasto ahora queda en el aire pues ella ahora tiene en su mente otras preocupaciones. ¿El gozo se irá al pozo por un tiempo?
Pero bueno, el cambio de la sobrina de CARLOS SALINAS DE GORTARI se inserta en una serie de movimientos que a la mitad de su administración hace el presidente ENRIQUE PEÑA NIETO, que más que cambios es un reacomodo de piezas más burocrático que de fondo y que dudosamente las coloca en el lugar adecuado, aunque hay una excepción. Expliquémonos.
AURELIO NUÑO, que hasta ahora fungía como jefe de la Oficina de la Presidencia y a quien se considera como uno de los consentidos de PEÑA NIETO, deja el cargo para irse nada menos que a la Secretaría de Educación Pública. Como dice un afamado escritor, “Hágame usted el refavrón cabor”.
¿Alguien sabe si NUÑO ha tenido alguna vez una experiencia docente o ha desempeñado siquiera una cátedra suplente en la UNAM u otra universidad? ¿Habrá leído más libros que su jefe? Uno de los más graves problemas en nuestro país es la educación. Las evaluaciones de organismos internacionales nos colocan en niveles alarmantemente bajos en ese rubro, no sólo por el pobre aprovechamiento del estudiantado, sino por la precaria preparación de los maestros.
En estos momentos está en juego la evaluación magisterial que no ha podido concretarse por las resistencias de grupos políticos arropados y tolerados durante décadas por el mismo sistema. ¿Habrá el “junior” AURELIO NUÑO arrastrado alguna vez el gis en el pizarrón como para decirles a los maestros como hacerlo?
La Secretaría de Educación Pública no es un cargo para seguir vigente en la vida política como muchas veces se ha considerado. Es una dependencia donde se diseña y se ejecuta el proyecto cultural de la Nación. JUSTO SIERRA se debe estar moviendo en su tumba.
Pero hay otro cambio que parece traer mensaje. La designación de JOSÉ ANTONIO MEADE como secretario de Desarrollo Social trasluce un intento por abrir la baraja de frente a la sucesión presidencial.
MEADE es un competente economista que fue secretario Hacienda con el panista FELIPE CALDERÓN HINOJOSA. Como encargado del servicio exterior tuvo oportunidad de conversar, convivir y establecer relaciones con jefes de estado, principalmente con el de Estados Unidos. Fue el único que se atrevió a condenar públicamente los ataques que el magnate republicano DONALD TRUMPH lanzó contra los inmigrantes mexicanos calificándolo de “ignorante”.
Ahora, en Desarrollo Social, tendrá la oportunidad de acercarse a la población mediante los programas de asistencia general. Así tendría en sus alforjas un claro entendimiento de la economía, de las relaciones internacionales y de las necesidades de los sufridos mexicanos además de una edad apropiada. Un capital político del cuál ningún otro integrante del gabinete puede presumir. ¿Estaremos frente al futuro candidato del PRI a la presidencia de la república?
Por otro lado, estamos en vísperas de que los alcaldes de la zona conurbada rindan sus respectivos informes. Hasta ahora los sondeos indican que GUSTAVO TORRES SALINAS, de Tampico, MARIO NERI, de Madero y ARMANDO LÓPEZ FLORES de Altamira, han cumplido fielmente su cometido.
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