CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Hermenegildo García Walle, delegado de la Procuraduría Agraria en Tamaulipas reconoció que “Los efectos de la sequía, la pobreza extrema que se vive y hasta la violencia en que se viven en algunos puntos del estado, no han podido desaparecer al ejido, aunque en muchos sólo subsisten personas de la tercera edad y mujeres”.
Dijo que de los mil 383 ejidos, de los cuales se estima que el 5 por ciento de ellos se puede observar el fenómeno del abandono, situación que se da en la región fronteriza y en el semidesierto.
“Es por eso que estamos trabajando para arraigar a las familias y evitar que se siga dando este fenómeno en el sector rural del estado”, expresó.
Afirmó que desde hace varios años este organismo ha promovido la inversión en la propiedad rural, para la creación de proyectos productivos en los ejidos.
“Esto ha permitido que se tenga una buena inversión en el campo, donde la gente del sector rural aparece como socios con la renta de tierras, para el desarrollo de proyectos como producción de cítricos, ecoturismo entre otros”.
El Delegado señaló que hay municipios del semidesierto como Jaumave, Tula y Palmillas, donde ya existen proyectos muy avanzados, donde se mezcla la inversión privada con la aportación de la gente de los ejidos.
El funcionario negó que los ejidos hayan sido abandonados en su totalidad por los diversos fenómenos que se están presentando en el estado, sin embargo en algunas regiones sí es muy marcado el fenómeno de que los ejidos están habitados sólo por personas de edad avanzada, mujeres y niños.
“Estamos trabajando para evitar que los jóvenes sigan dejando las comunidades rurales por falta de oportunidades laborales”.
Absorben ciudades las zonas rurales
Los ejidos que se ubican en las cercanías de los centros urbanos tienden a desaparecer debido al crecimiento desordenado que registran las principales ciudades de Tamaulipas.
Florentino Sáenz Cobos, dirigente de la Liga de Comunidades Agrarias, afirma que por lo menos 20 comunidades rurales de Tamaulipas, fueron devoradas en los últimos cinco años por las manchas urbanas, situación generada por el crecimiento registrado en las grandes ciudades del Estado.
Datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), reveló en el último estudio que la población de Tamaulipas pasó de 3 millones 341 mil 900 habitantes, a 3 millones 429 mil 700, lo que equivale a un crecimiento de 87 mil 800 personas más en los últimos tres años.
“Este fenómeno se da con más regularidad en la región fronteriza, por el éxodo migratorio de familias de otros estados o de la zona rural a las ciudades de Matamoros, Reynosa y Nuevo Laredo”.
Señala que muchas de las personas que llegan con intenciones de cruzar hacia los Estados Unidos y al no lograrlo, deciden quedarse incrementando con ello las demandas de terrenos y viviendas, lo que obliga al crecimiento desordenado de las ciudades.
Estimó que en los últimos años 20 comunidades rurales han sido devoradas por las ciudades, donde muchos de esos predios son adquiridos por inmobiliarias dedicadas a la construcción de casas o organismos estatales como el Instituto Tamaulipeco de Vivienda y Urbanización (ITAVU) y Comisión para la Regularización de la Tenencia de la Tierra (CORETT).
El líder campesino señaló que tan sólo en ciudad Victoria, por parte de instituciones gubernamentales, se han tenido que expropiar algunos predios de ejidos como La Presita para la construcción de nuevas colonias, así como del Módulo de la Secretaría de Seguridad Pública.
“También el ejido Guadalupe Victoria le han expropiado otros predios para la edificación de instalaciones como la Procuraduría General de Justicia y el Nuevo Hospital de Especialidades Médicas”.
Escasean apoyos educativos para jÓvenes campesinos
Debido a que al año cerca de dos mil jóvenes campesinos se ven obligados a dejar sus estudios por la falta de recursos, es urgente que se implementen programas de becas en el sector campesino, afirmó Óscar
Maldonado, dirigente de la Vanguardia Juvenil Agrarista.
Dijo que la deserción escolar preocupa en el campo, ya que los estudiantes no pueden costear sus estudios en instituciones de educación media y superior, por lo que es necesario que existan mayores apoyos para este sector.
“La falta de empleo en el campo o de ingresos para los campesinos, también es otro factor que afecta a los jóvenes, debido a que las instituciones donde estudian se encuentran en zonas urbanas y tienen que gastar en pago de rentas, servicios, colegiaturas y alimentos”.
La difícil situación que se atraviesa en el campo, donde la sequía impactó las cosechas el año pasado y mató al ganado, originaron también que la situación empeorara.
“En el campo no hay mucho recurso en estos momentos ya que los programas de empleo temporal que aterrizan, inician hasta el mes de abril o mayo y por ahora no hay recursos frescos”.
A través de la dirigencia estatal cenecista, están demandando a las autoridades elevar el número de apoyos a los estudiantes de los diversos niveles de educación para que, de esta manera, se evite que los estudiantes campesinos deserten de las escuelas.
“Es mucho el gasto diario que tienen que hacer los estudiantes, los cuales requieren en promedio entre 50 a 60 pesos diarios tan sólo para ir a la escuela, donde requieren adquirir material, invertir en transporte público, comida entre otros”.
