Lo mismo que concluyeron científicos de la Universidad Nacional Autónoma de México, UNAM, respecto a las dudas acerca del dictamen de la Procuraduría General de la República, PGR, es lo que dictaminaron los expertos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, CIDH, que obligó a Enrique Peña Nieto ahora sí, a recibir a los padres de los 43 estudiantes de Ayotzinapa.
Los científicos mexicanos expusieron los mismos puntos que los de la CIDH, en cuanto que incinerar 43 cuerpos requiere 30 mil 100 kilos de madera y 13 mil 330 kilos de neumáticos. Esas mismas conclusiones, aunadas a que presenciar una fogata de ese tamaño implica morir por efecto del calor y además se hubiese provocado un incendio de grandes dimensiones.
En pocas palabras, los expertos independientes no dijeron nada nuevo, ya científicos mexicanos habían hecho esa conclusión desde hace muchos meses.
Es penoso que en su momento la PGR no prestó atención al dictamen de la UNAM, Jesús Murillo Karam, ex procurador, se empeñó en afirmar una verdad que dejó de ser histórica al caerse todas las evidencias que habían presentado.
También, por lo tanto, se cae la versión oficial de que ni la policía, ni el ejército participaron en la desaparición de los normalistas.
Desde un principio también se manejó la posibilidad de que los estudiantes hubiesen sido incinerados en los hornos que tiene el ejército y a los cuales pidieron el acceso los padres de los desaparecidos pero el gobierno se negó a autorizarlo.
El secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong, tiene mucho qué decir respecto a este tema, el ex gobernador de Guerrero también, y la pareja encarcelada a la que no han permitido hacer ninguna declaración en torno a su presunta participación.
Las cosas están enredadas en esta investigación porque alguien dentro del propio gobierno peñista está empeñado en que no se conozca la verdad.
En torno a este tema está pasando lo que sucedió en Guatemala donde la intervención de la Organización de las Naciones Unidas obligó a llevar a juicio al ex presidente y muy probablemente permanezca años en la cárcel, también la población está ejerciendo su derecho al voto y van en la segunda vuelta.
La intervención de organismos internacionales está obligando a los gobiernos de México y Guatemala a actuar, porque son sordos y ciegos a los reclamos de la ciudadanía.
Con los ojos cerrados Peña Nieto ha confiado en su equipo de trabajo de primera línea, los dos más fuertes, Osorio Chong y Videgaray siguen dando al espalda a los reclamos del pueblo.
Y él, como presidente es responsable directo de la omisión en que incurren sus dos colaboradores preferidos.
Dice Peña Nieto que a él le interesa conocer la verdad detrás de la desaparición de los normalistas y que recibirá a los padres que desde que no los encuentran han vagado por distintas partes del país y del mundo buscando justicia.
Una vez más los mexicanos lastimados tienen que salir a gritar en el extrajero, para que los escuchen en su propio país.
Espero que una vez sostenida la reunión con los padres y revisado el dictamen de la CIDH Peña Nieto ordene una nueva investigación y que por lo pronto se dé cuenta que tanto Osorio Chong y Videgaray ya no tienen qué ofrecer a su gobierno, por lo cual deben ser retirados de sus cargos y poner ahí a personas expertas y comprometidas que velen por los intereses de los mexicanos.
UNA BUENA NOTICIA
Rezago educativo, ingreso, acceso a los servicios de salud, acceso a la seguridad social, calidad y espacios de la vivienda, servicios básicos en la vivienda, acceso a la alimentación y grado de cohesión social, fueron los indicadores evaluados por el CONEVAL en Tamaulipas a fin de dar seguimiento, direccionar e implementar nuevas estrategias y programas en beneficio de la población. El resultado de esa evaluación determinó que esta entidad obtuvo el más alto indicador en el rubro de acceso a la salud, lo que tiene muy satisfecho al secretario, Norberto Treviño.
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