CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Dentro de la clase trabajadora, también hay linajes y abolengos. Y se llevan la tajada más grande del pastel salarial y de prestaciones laborales, que van desde los mejores ingresos hasta las mayores concesiones.
El STPRM, el SUTERM y el SNTE, son los ejemplos más claros de esta inequidad sindical.
Los privilegios que tienen algunos sindicatos pueden incluir faltar meses por comisiones políticas poco claras, más electricidad que la que gasta cualquier familia promedio, o convertir en deuda público los quebrantos en su fondo de pensiones, o bien tener derecho a contratos del patrón en condiciones privilegiadas.
También más días de descanso obligatorio o días feriados que cualquier otro trabajador, que van desde los 19 que descansan los telefonistas hasta cerca de los 40 que descansan los maestros, además de sus periodos vacacionales.
Los sindicatos, especialmente maestros, petroleros, electricistas y las centrales como la Confederación de Trabajadores de México (CTM) y los burócratas, son hacedores de políticos quienes además de cargos legislativos y hasta ejecutivos, conservan derechos y mando sindical y la patente de poderse conducir con toda opacidad.
Aunque todas las legislaciones prohíben que se puedan cobrar dos salarios de entidades públicas por trabajos de tiempo completo, la mayor parte de los representantes de sindicatos ligados a la esfera pública, evaden este requisito y en otros casos, entraron al sindicato desde arriba, no por un empleo en la base gremial.
Es el caso del tampiqueño Carlos Romero Deschamps, quien sin dejar de estar en la dirigencia sindical y sin dejar a un lado los derechos a negocios que tiene el Sindicato Petrolero, ha sido cinco veces diputado y dos veces senador, ocupando un espacio plurinominal de su sindicato.
En total, Romero Deschamps, de 72 años, ha sido legislador federal 24 años sin tener que enfrentar una sola elección ni constitucional ni al interior de su partido, y aún le queda una legislatura por cumplir para completar 27 años como legislador.
Un caso nuevo es Rafael Méndez Salas, quien llega por Nueva Alianza, aparentemente sin haber dejado el cargo sindical y sin dejar de cobrar las dos plazas que nunca ha laborado y por las que cobró del Fondo Nacional de Educación 227 mil 864 pesos en el primer semestre de 2015, cuando supuestamente ya era dirigente de Nueva Alianza y gran parte de este tiempo, candidato a diputado.
La cláusula 91 del Contrato Colectivo de Trabajo (CCT) entre Telmex y el Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana (STRM) para el contrato colectivo aún vigente, los días de descanso son 1 de enero, 5 de febrero, 18 y 21 de marzo, Jueves, Viernes y Sábado de Semana Santa; 1, 5 y 10 de mayo; el 1 de agosto.
Tambien el Día del Telefonista, el 15 y 16 de septiembre, 12 de octubre, 2 y 20 de noviembre, el día de transmisión de poderes del Ejecutivo Federal, el 12 y 25 de diciembre y los días de elecciones locales y federales, es decir, de 19 a 20 días dependiendo del año.
En el caso de los miembros del Sindicato Único de Trabajadores Electricistas de la República Mexicana (Suterm) además de los días feriados reconocidos por la ley, que son siete, a los que agregan Jueves y Viernes Santo y el 2 de noviembre, tienen derecho a 10 días más de los cuales, dos puede trabajar pero se les pagará doble salario.
Además la Cláusula 52 de CCT del Suterm con la Comisión Federal de Electricidad señala que los días de descanso obligatorio: “semanal, legales o contractuales, no se computarán como parte de los periodos de vacaciones.
Tampoco pueden computarse como días de vacaciones los que dejen de asistir por “riesgos de trabajo o no profesionales o usando permisos con pago de salarios.
Los permisos con goce de salario por encima de lo que la Ley Federal del Trabajo otorga los trabajadores, son seis semanas por adopción para las madres, cinco días por nacimiento de un hijo para los hombres, y en el caso de los titulares del Comité Ejecutivo Nacional sindical, por el tiempo de sus funciones.
La CFE entrega 31.6 por ciento sobre los salarios y tiempo extraordinario para el fondo de ahorro, el cual se entrega a los trabajadores el 15 de diciembre, esto además de otro cinco por ciento que se les entrega en la primera catorcena de enero.
Además del salario los electricistas tienen derecho a 47.6 por ciento sobre su salario tabulado y tiempo extraordinario por concepto de renta de casas.
Pese a los recortes que la Reforma Educativa impuso a las “conquistas salariales” que todos los mexicanos pagan, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) incluida la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) aún pueden conceder larguísimas licencias con goce de sueldo, por cuestiones políticas que no atañen al sindicato.
Aunque el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (Stprm) perdió su asiento con voz y voto en el Consejo de Administración de Pemex con la nueva Ley de Pemex, pero aún pueden hererdar la plaza y jubilarse a los 35 años de servicio o 55 años de edad.
TARIFAS SIN ALTO CONSUMO
En la Cláusula 67 del CCT de la Suterm, los electricistas reciben de la CFE una cantidad de kilowatts hora que significa en Tamaulipas, con la tarifa 1C, tres mil 395 pesos en
electricidad en verano y tres mil 386 pesos en invierno, a las tarifas actuales.
Aunque para la zona 1C la tarifa domiciliaria se Escala a la Tarifa de Alto consumo cuando se promedia en un año más de 850 kilowatts hora mensuales (kWh/mes) los trabajadores de CFE reciben subsidio de electricidad por un promedio de mil 350 kWh/mes, esto es, 500 kWh/mes por arriba de la cantidad máxima permitida a los demás usuarios.
Este subsidio en verano en las diversas zonas del país va de los 600 kWh/mes a dos mil 500 kWh/mes en zonas como Mexicali, y es particularmente ofensivo en una región como Victoria que paga la tarifa eléctrica más cara del país, al ser la menos subsidiada proporcionalmente al clima.
VIEJO NO, JUBILADO SÍ
Esta edad de jubilación, además de malos manejos sindicales, ha llevado al fondo de pensiones de Pemex a un quebranto de 1.3 billones (millones de millones) de pesos, parte de los cuales deberán convertirse en deuda pública, para evitar la quiebra de la ahora Empresa Productiva Nacional.
Las negociaciones que culminaron en la primera quincena de septiembre, señalan que será “la nueva generación” de trabajadores los que puedan jubilarse hasta un mínimo de 65 años de edad con el 100 por ciento del salario, mientras los demás trabajadores escalarán anualmente la edad hasta llegar a un máximo de 62 años para jubilarse, lo que ocurrirá a partir del 2025.
Los trabajadores de la Suterm que hayan ingresado antes del 18 de agosto de 2008, podrán seguirse jubilando con 25 años de servicio y 55 años de edad cumplidos o con cualquiera que sea la edad si tienen 30 años de antigüedad.
La “nueva generación” del Suterm, los que entraron después del 18 de agosto de 2008 podrán jubilarse con el cien por ciento de su salario cuando tengan 30 años de servicio y 60 años de edad o con 35 años de servicio sin límite de edad, en el caso de los hombres y 30 años de servicio las mujeres.
El caso del STRM o Sindicato de Telefonistas, los que ingresaron a la empresa hasta el 25 de abril del 2009, pueden jubilarse con 25 años o más de servicios y 53 años de edad si son hombre y 48 si son mujeres y cobrar 50 por ciento de la pensión que escala al 80 por ciento cuando la antigüedad es de 31 años o más.
Los que ingresaron luego de ese 25 de abril, deberán trabajar cuatro años más para poder obtener una jubilación con el 50 por ciento del salario a los 29 años de servicio y 60 años, y del 80 por ciento con 35 o más años de servicio.
De acuerdo a la esperanza de vida estos trabajadores jubilados antes de los 53 años, cobrarán 23 años una pensión en promedio por 25 años de servicio.




