Desde hace tiempo que la intolerancia se apoderó de la dirigencia de la Sección XXX-SNTE. Es ahí donde Rafael Méndez Salas mucho tendría que explicar sobre el respeto a la libertad de expresión. Los hechos registrados este lunes debieran llenar de vergüenza a la organización y poner alerta al gremio periodístico.
El atentado que sufriera el compañero José Inés Figueroa Vitela a manos de guaruras, “porros” y policías en un evento promovido por el PANAL y apoyado por el SNTE, es una regresión reprobada y condenada de antemano por la sociedad por la sencilla razón de que la barbarie contra comunicadores es una época superada desde hace décadas.
Agredir y “esposar” a un periodista que acude a cumplir con su trabajo es un capítulo digno de cualquier película de terror.
La comunidad no lo merece. Han sido muchos años de esfuerzo para lograr el respeto hacia el oficio como para que mentalidades obtusas lo echen por la borda sin el menor respeto a la Carta Magna.
Es una pena y una desgracia que suceda y se genere en el seno de una organización que históricamente ha sido ejemplo de pluralismo crítico y ejercicio democrático.
Un abrazo solidario para mi amigo y compañero José Inés, otra víctima de la prepotencia que deshonra a las instituciones y por supuesto al SNTE y al PANAL.
“¿REVOLUCIÓN
SILENCIOSA?”
Mientras tanto, reconocidos y prestigiados políticos e integrantes de la sociedad civil se han echado a cuestas la organización de un grupo al que llaman “Por México Hoy”. Entre ellos se encuentran Cuauhtémoc Cárdenas, Porfirio Muñoz Ledo, Alejandro Encinas y muchos más.
El objetivo no es nada fácil pues se trata de crear una nueva Constitución que contenga las demandas más sentidas, es decir, las transformaciones reales que demanda la población y no las que se le ocurre a la tecno-burocracia para quedar bien con el capital nacional y extranjero, especialmente con este último, rematando de paso la riqueza pública, sease los recursos naturales que originalmente pertenecían a la nación y que ahora han quedado a disposición del comprador más influyente y aprovechado.
El objetivo no es nada fácil insisto, porque cambiar la Constitución será también cambiar la relación entre poder y sociedad.
Es para decirlo pronto, una especie de revolución silenciosa que ahorraría ríos de sangre si es que algún día los mexicas se animan a protestar en serio contra de quienes nos han llevado al límite de la pobreza y la hambruna.
De manera que “Por México Hoy” significa la revolución silenciosa que persigue la justicia social y de ninguna manera es un partido, ¡ufff, solo eso faltaría!, y como no tendrá nada que ver con la política, tampoco se opondrá, ni se entrometerá ni estorbará a ningún candidato o partido político que se la juegue para la sucesión presidencial. (Es lo que dicen, falta que lo cumplan).
En este sentido pareciera que el mensaje va dirigido a López Obrador, por aquello de que imagináramos que “Por México Hoy” nace con aviesas intenciones de detener la marcha de AMLO hacia Los Pinos.
Claro que esto último es de creer considerando que el hijo de “Tata” Lázaro no se resigna a que “el peje” figure como candidato presidencial por tercera ocasión. Recordéis la mala leche de Cuauhtémoc cuando le negó el apoyo a AMLO en la contienda contra Calderón, facilitando de esta manera el arribo de la derecha al gobierno por segunda ocasión.
Quedamos en que el objetivo fundamental de “Por México Hoy” es la creación de otra constitución de la república documento que a saber vio luz primera con “Los Sentimientos de la Nación” de Morelos para luego ser modificada durante la Reforma concretándose después de la revolución maderista.
Y cada cambio tuvo su cuota de sangre y de poder. ¿Cómo harán Cuauhtémoc y sus socios para lograr una nueva constitución?. ¿Será así de sencillo como lo plantean o solo tienen la intención de permanecer como noticia en los medios?.
Además imagine los recursos que se requieren, primero para cambiar la mentalidad del legislativo y después para crear una nueva nación. No se ve por dónde, digo yo. Por otra parte no olvidéis que tanto Porfirio como Cuauhtémoc bordean los ochenta años y aunque en política nadie se jubila lo más probable es que vivan sus últimas aventuras de este tipo, dicho sea con el debido respeto.
SUCEDE QUE
El escribidor supone que Arturo de León Loredo, responsable al parecer del INE en la entidad, debiera ser más explícito respecto del Partido del Trabajo.
Y es que suena medio raro que dicho partido haya perdido su registro nacional y sin embargo esté en la oportunidad de participar en Tamaulipas.
Por supuesto que después de las declaraciones del funcionario el más feliz debe ser Alejandro Ceniceros, gerente histórico de la organización…Por cierto, ¿qué os parecen las afirmaciones de Manlio Fabio Beltrones en cuanto a que los partidos “son indispensables e irremplazables”. Seguro que “el bronco” todavía se estará carcajeando a lomo de su “Tornado”.
Y hasta la próxima.
