CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Cuando llega el invierno en Victoria, el clima y las aventuras de esa época son impredecibles, aunque la mayoría de sus días son cálidos, el invierno puede generar sorpresas e imágenes para el recuerdo.
Muchos de los victorenses que hoy llegan al medio siglo de vida ya cuentan sus anécdotas invernales, justo en el tiempo en que se vive la quinta tormenta invernal del año 2015.
La memoria comienza a hacer recuento y aparece el invierno de 1983, cuando la calle Carrera Torres era aún en doble sentido.
“Ese día recuerdo que tenía que trabajar en el Fénix que estaba en contraesquina del la Súpertienda Modelo del Mercado. Yo vivía en el 20 y 21 Aldama y al caminar hasta allá me ardieron los pies, recuerdo que no los sentía, mi papá tuvo que darme un masaje y sólo así puede dormir cuando regresé a mi casa”, dice María, mientras recuerda un poco de los días en la ciudad que don Carlos Adrián Avilés hacía únicos con los comentarios en “Alegría Matinal”.
Elena, recuerda que en toda la ciudad detuvieron la circulación porque era un peligro transitar por las calles que tenían hielo en su pavimento.
“No había peseras y yo trabajaba en “Las Fuentes”, desde allá me tuve que venir caminando hasta mi casa en el 23. Esa vez la fuente del 17 se congeló y aún hay fotos todavía circulando en internet”.
Otra de las ondas gélidas para Victoria que se hacen memorables por contrastar con la mayoría de los días soleados en la capital tamaulipeca es el invierno de 1989.
“Yo me acuerdo que hasta unos pantalones que estaban en el tendedero amanecieron duros”, dice alguien más en la plática…
Y entonces comienzan los recuerdos…
Ricardo Haces Guillén, creador del grupo de Facebook, “Fotos Antiguas de Ciudad Victoria”, recuerda una nevada del 9 de Enero de 1967…
“ Yo tenía 10 años, recuerdo que fue una capita de nieve de 2 o 3 centímetros, pero sí era nieve, hay una foto en el grupo de dos casas de palma con nieve arriba. Hay otra donde estamos en la Loma a la altura de lo que es Leyes, ahí estamos retratados con una carcachita, mis hermanos, unos primos y el servidor”…
Avanzan los años hasta la helada de 1983, la que narran María y Elena, en las primeras líneas.
“ De 1983 recuerdo una helada, estuvimos a nueve grados bajo cero. En ese tiempo teníamos una combi, ves que los laterales de la combi son lisos, nosotros experimentábamos y le poníamos agua, le dejábamos caer el agua y ésta se congelaba, no alcanzaba a llegar al piso, se hacía hielo”.
En algunas casas de Victoria se llegaron a ver estalactitas de hielo, se formaban porque las tuberías se reventaron y el agua escurría y se congelaba.
Una de las fotografías del agua congelada en la fuente de la avenida 17, la tomó Ricardo Haces en el 17 Morelos e Hidalgo.
