MÉXICO, D.F.- La escalada de violencia en Michoacán no ha modificado el plan del Papa Francisco de visitar la entidad sin medidas de seguridad extraordinarias, afirmó el Cardenal Alberto Suárez Inda.
«No creo que haya ningún cambio. El Papa no ha pedido medidas extraordinarias, sino estar cerca de la gente», declaró el también Arzobispo de Morelia.
En conferencia de prensa, el prelado dijo que de no tener acercamiento con el pueblo el Pontífice optaría por no venir a México.
«En todo caso no vendría el Papa; no vendría si no tiene la confianza que pone en Dios y que pone en el cariño del pueblo», comentó.
Suárez Inda dijo que en cualquier lugar del mundo puede darse un incidente, pero el Papa se siente en las manos de Dios.
«Que yo sepa no ha cambiado para nada esa política del Papa, de estar sin necesidad de mayor protección. La protección, pienso, está más en función del pueblo, de que no haya atropellados», expresó.
«Se debe de cuidar de que no haya empujones, personas asfixiadas, que haya orden, pero en la persona del Papa esto (de la seguridad) a él no le causa mucha angustia».
En Michoacán, en los últimos tres meses se han registrado alrededor de 100 muertes violentas.
De esos crímenes, casi una tercera parte se registraron en las ultimas dos semanas y algunos han sido atribuidos por las autoridades a un intento de reacomodo de los grupos delincuenciales.
«Creo que el Papa y todos estamos conscientes de que la solución (al problema de la inseguridad) tiene que ser de raíz, no maquillar la realidad», agregó.
«México vive un momento privilegiado para tratar de enderezar el rumbo. No sólo me refiero al gobierno, sino a un pueblo que dice ‘ya basta», un pueblo que quiere vivir en paz».
La visita del Papa Francisco a la entidad está prevista para el próximo 16 de febrero.