Una sociedad como la nuestra, urgida de respuestas, pero sin la capacidad de proponer y de organizar foros y mesas, al margen de la partidocracia, tuvo realmente el debate que se merece. Fue un debate de chismes y de descalificaciones, elementos que caracterizan a nuestro ADN tamaulipeco.
Ciertamente, el encuentro entre los candidatos a la gubernatura, estuvo sobrecargado de señalamientos sustentados en el rumor, la intriga y el golpe bajo. Parece que eso es lo que le gusta a la mayoría de los electores. Pues eso fue justamente lo que consumieron, la noche del pasado sábado 23 de abril.
Tampoco creo que el debate resulte decisorio para inclinar la balanza, hacia tal o cual candidato. Su calidad utilitaria, se reduce al balconeo y al desahogo hormonal de los participantes. Más allá, le puedo asegurar que solamente un 30 por ciento de los potenciales votantes, vieron la batalla verbal, entre los ilustres pretendientes a la gubernatura. En menos de diez días, habrá un segundo agarre.
Espero que en este encuentro que se avecina, la sociedad de Tamaulipas, sea realmente tomada en cuenta. Porque, en este debate que acaba de pasar, los electores fueron ignorados. Y los candidatos solo se preocuparon por arrojarse toda la mugre que pudieron recoger en el pantano.
ÓSCAR ALMARAZ, Y SU INTENSA PRESENCIA EN EL INTERNET
Ya en otras ocasiones, me he referido a la contundente campaña del candidato del PRI a la alcaldía de ciudad Victoria. Hoy quiero resaltar su dinámica y muy completa estrategia en los espacios del internet. Cualquiera lo puede comprobar, pues los promos de la campaña de OA, se encuentran ligados a una infinidad de páginas virtuales, relacionadas con la música, los deportes y una gran diversidad temática. La campaña de Óscar va con todo.
LAS REDES SOCIALES, ¿ALIADAS INDIRECTAS DEL PRI?
Después de esta elección constitucional en Tamaulipas, las redes sociales quedarán reconocidas como uno de los factores más relevantes, en el sentir de la población. Pero déjeme advertirle algo: hasta
ahora, ningún partido, ha sabido instrumentar una adecuada estrategia en los espacios de la comunicación, vía internet. Si bien es cierto que, los espacios virtuales, representan hoy día, el territorio
del desahogo ciudadano por excelencia, también es verdad, que del decir al hacer, hay mucho trecho.
Le pondré un ejemplo gráfico y contundente: recientemente en las redes sociales, apareció una convocatoria a una marcha por la paz en esta capital. Estuvieron varios días invitando a la población, y por la naturaleza del tema, uno pensaría que la famosa movilización blanca, fue todo un éxito, pero no fue así.
Llegado el momento, por las fotos que vimos, solo acudió un grupito de 20 ó 25 personas. El grueso de los ciudadanos, prefirieron quedarse en sus casas. O sea, quedó demostrado que las redes sociales, al menos aquí, solo sirven para vociferar y darle vuelo al sarcasmo de la gente, pero no para ejercer de una manera seria, las diferentes formas de la democracia política. Vistas desde ese ángulo, las redes sociales, demostraron que son ineficientes, y que solo quieren asustar con el petate del rencor social, pero son un mito, una falsedad.
Si esta tendencia de las redes, llega con la dinámica de una simple catarsis a la elección del cinco de junio, pues ya podemos dar como un hecho que el panismo, habrá fallado en sus cálculos de capitalizar el hartazgo de la ciudanía. Viéndolo bajo este enfoque, entonces las redes sociales, se podrían convertir en el mejor aliado del PRI y de que dicho partido, refrende el poder, en el estado.
Antes de las redes sociales, una manifestación de descontento social, solo tenía a los medios de comunicación tradicionales, para expresarse. Y si estos medios no le daban voz a ese tipo de protestas, se decía que los votantes explotaban en las urnas. Pero hoy, espacios virtuales como el Facebook, Twiter, yotube, y demás recursos del sarcasmo colectivo, como los memes, se encuentran a la orden del día.
En las redes sociales, el profesionista, el estudiante, el ama de casa, el obrero, el burócrata, y hasta el hijo de campesino, dejan su veneno existencial, derivado de la falta de oportunidades para avanzar en la escala social. Finalmente, la tecnología les ha creado un espacio para que den rienda suelta a ese alivio de expresarse y de gritar, sus desacuerdos.
De una o de otra manera, las redes sociales, curan el alma resentida de la población electoral. ¿Les alcanzará el rencor social, para acudir a las urnas?
POSDATA: La seguridad sigue siendo el gran tema electoral. Con él a cuestas, los candidatos buscan marcar la diferencia.