Igual que los malos hábitos, las malas mañas, como advierte el dicho, también se pegan. Lo citamos porque, no obstante las críticas provocadas por el lenguaje soez que Gustavo Cárdenas Gutiérrez y Jorge Valdez Vargas han impreso a las campañas electorales, ahora el propio candidato priista a gobernador , Baltazar Hinojosa Ochoa le ha entrado a la práctica de la jerigonza.
Durante una reunión celebrada ayer con agricultores de San Fernando, el abanderado de la alianza tricolor, que se había caracterizado por emplear un vocabulario correcto, sorprendió a los asistentes cuando, después de aceptar que, como muchos otros tamaulipecos, los delincuentes también lo habían molestado a él, espetó : “conmigo los malos se van a chingar”.
La expresión, como era de esperarse, provocó risas pero también reacciones de asombro, pues es la primera vez que el candidato del Revolucionario Institucional recurre a este léxico en un acto proselitista para anunciar las medidas que piensa poner en práctica para frenar la violencia que padece la entidad.
Alguien aludió, asimismo, al dedazo como método para la elección de candidato a puestos de elección popular inventado por el PRI, que ha contagiado al PAN, a pesar de que este se proclamaba paladín de la democracia, que ha echado mano a la maniobra para resolver los procesos internos, como el de los candidatos a gobernador, alcalde y diputados de la actual contienda sucesoria.
La que de manera tácita e indirecta,
en cambio, desaprobó el golpeteo de los adversarios fue Magdalena aPeraza Guerra. Entrevistada sobre cómo va su campaña política en una caminata por la
colonia del Pueblo, en la que la candidata priista tiene su domicilio, declaró “vamos bien y sin criticar ni hablar mal de nadie”.
El tema que sigue dando de que hablar, por otra parte, es el de la cancelación del registro de los candidatos del PRI a las alcaldías de Hidalgo, Mainero y Villagrán, que ha tenido repercusiones nacionales, por supuesto nexos con el crimen organizado denunciado por el propio dirigente nacional, Manlio Fabio Beltrones Rivera, en la pasada visita a Tampico.
Los expulsados del ex invencible, Reyes Zúñiga Vázquez, Gustavo Estrella Cabre- ra y Luis Aldape Lerma, ofrecieron una conferencia de prensa en Monterrey, en la que, además de negar las imputaciones del dirigente tricolor, declararon que se les ha difamando y causado un grave daño moral a sus personas y a sus familias.
Piden que se les investigue porque, dijeron, no tienen nada que ocultar e incluso invitaron al señor Beltrones a que recorra los municipios a los que pensaban gobernar y le pregunten a la gente casa por casa para que compruebe personalmente que son persona de trabajo.
Dejaron entrever, no obstante, que quizá la causa por la que se les anularon las candidaturas es que asistieron a una reunión del candidato del PAN gobernador, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, pero de ninguna manera porque fueron amenazados ni comprados por la delincuencia, como los acusan.
La propuesta novedosa de las actividades proselitistas, sin embargo, la dio el candidato del ex invencible a alcalde de Madero, Humberto Oliva Barreda, quien anunció que, por primera vez, si el voto lo lleva a la presidencia municipal, la urbe petrolera contará con un Plan Municipal de Ordenamiento Ecológico. Y hace bien, porque los índices de contaminación de aquella ciudad son cada vez más elevados.
El candidato del PAN, Andrés Zorrilla Moreno, que ha tenido una aceptación ciudadana que no se había visto, tampoco se queda atrás.
En una plática que nos concedió ayer, el empresario informó que las acciones que tiene pensado emprender para sacar al municipio del deplorable estado en el que se encuentra tiene dos vertientes. 1.Promover el desarrollo económico y el turismo, y 2.Impulsar el desarrollo social, especialmente en las colonias marginadas, para rescatarlas del atraso y el abandono a través de un intenso programa de obras y servicios públicos.
La actual coyuntura de descontento popular contra los gobiernos priistas, causado por el retraso urbano en el que tienen sumida a la población, dijo, es una oportunidad que no desaprovechará para cambiar realmente al municipio, no únicamente de palabra.




