El autor es Premio Nacional de Periodismo 2016.
En escaso tiempo el supremo gobierno ha convertido a la iglesia católica en el más poderoso de sus adversarios. Olvide a la CNTE, los partidos “de oposición”, López Obrador y a todos aquellos que algo tienen que reclamar al régimen tricolor porque el clero, señores, señoras, es enemigo de verdad. Y es que los casi cien millones de afiliados a la causa celestial no son pocos aunque suficientes para sacudir a las autoridades por más institucionales que se consideren. Lo que sucede entre el catolicismo y el poder civil no es juego, sino parte de una guerra recrudecida de unos meses hacia acá que no sabemos hasta dónde pueda llegar tomando en cuenta las coincidencias entre el mando religioso y los millones de mexicas ofendidos por las actitudes oficiales.
Usted dirá que parece una contradicción porque en México iglesia y gobierno se llevaron bien desde que finalizó la tormentosa “guerra cristera”.
Tiene razón, pero ya no, y si viera que ahora las autoridades iniciaron esta peligrosa aventura presionando para que la jerarquía católica cumpliera con el fisco sin excusa ni pretexto. Creo que hasta las limosnas de los domingos son materia de impuesto, “cuantimás” el célebre “diezmo” que para efectos de salvación de almas tiene interpretación diferente a la de ciertos funcionarios que prefieren darle importancia terrenal y mundana, sea de bolsillo a bolsillo. Por otra parte, no es secreto la suposición de que un buen número de empresarios “colaboran” con la iglesia, especialmente aportando recursos económicos bajo el objetivo de mantener abiertas las puertas del cielo para lo que se pueda ofrecer. (Así traerán la conciencia).
Después de las presiones fiscales vino lo mero bueno con la iniciativa presidencial y posterior aprobación legislativa del matrimonio entre personas del mismo sexo y la posibilidad de adopción como cualquier pareja.
Los clásicos dirían, “fue la gota que derramó el vaso”. Y en efecto lo derramó de manera tan abundante que la iglesia está cierta que las reformas estructurales han dividido a los mexicanos ahondado las diferencias, por lo tanto son motoras de injusticia e inestabilidad social. ¡Rájale!. No está por demás recordar que tales reformas son las joyas de la corona del neoliberalismo adoptado desde los tiempos de Salinas de Gortari y ratificado por el régimen del presidente Peña Nieto.
REFORMAS “HACEN AGUA”: IGLESIA
En su editorial de la publicación semanal “Desde la fe”, la arquidiócesis que como sabéis es la máxima autoridad católica, también se deja caer contra quienes integran la Suprema Corte de Justicia de la Nación, legisladores y hasta partidos políticos, en estos términos: “el presupuesto no debería amparar lujos irresponsables y salarios indecentes de burócratas que han fallado a México, ni sostener partidos políticos, ni soportar dietas de legisladores empeñados en mantener lujos, prebendas y canonjías”. ¡Recontra-rájale!. Concluyendo que las reformas impuestas por el gobierno tricolor “están haciendo agua”. Sea que están al punto del naufragio, digo yo.
Lo anterior bien podría considerarse como aceptación de la guerra como respuesta a la incitación oficial, pero ojo que esto puede tener alcances no imaginados. Un ejemplo, ¿qué tal si los curas reciben la consigna de apoyar la inconformidad social que seguro existe hasta en los rincones más apartados del país?. Y no se diga si la iglesia católica se agrega a los movimientos en curso como el magisterial, contra la corrupción y la impunidad, el de padres de los normalistas desaparecidos, contra la violencia femenina y familiar, a favor de los derechos humanos, etc, etc. ¿ Y qué tal si llama a dejar de pagar impuestos?.
Esta confrontación no es un juego, insisto, sino parte de la crisis que ha debilitado y puesto en riesgo las instituciones. El columnista no pretende exagerar pero si el clero se lo propone podría crear un gran frente que Dios guarde la hora. “Con otra”, como dijo aquel, no dudéis que para criticar incluso atacar y retar al gobierno, seguramente cuenta con el aval del Papa Francisco. ¿Cree usted que Norberto Rivera Carrera, Arzobispo Primado de México se manda solo?. Os recuerdo que la iglesia católica en nuestro país cuenta con un activo cercano a los cien millones de fieles y ninguno quiere ir al infierno. Al menos por ahora.
SUCEDE QUE
El dirigente del SNTE resultó tan “gandalla” como el que más. Y es que en un video de alto costo mediático sin rubor ni escrúpulos Juan Díaz de la Torre se adjudica algunos “rounds” ganados por la CNTE, como es la revisión y adecuación de la evaluación docente y la reposición de beneficios derivados de la carrera magisterial, entre otros.
La impresión de la canalla del café es que este “juanito” no sirve ni para “patiño” del secretario Aurelio Nuño….Mientras tanto y en opinión del columnista, Virgilio Andrade renunció a la Secretaría de la Función Pública porque se cansó “de hacerle al tío Lolo”. ¿Acaso como los pitchers relevistas, sólo fue llamado para sacar el tercer out cuando había amenaza de “casa blanca” (digo, “casa llena”), en la novena entrada?. Lástima porque los compas caricaturistas pierden a un excelente modelo.
De cualquier forma no deja de ser una curiosidad que renunciara justo en la fecha en que EPN dio a conocer las leyes del mentado, ”Sistema Nacional Anticorrupción”. A propo, el preciso pide perdón ¿Pues no que lo de las Lomas era un invento?. Así lo señalaron en su momento algunos “anolistos”, como solía calificarlos el inolvidable Jorge Rodríguez Treviño.
Y hasta la próxima.